A diario asistimos a episodios protagonizados por personas que no parecen estar en su sano juicio, distan de un estado de sana razón. En estos casos, la irracionalidad en los seres humanos contrasta con el uso de la razón. La falta de cuidado y de precaución de mucha gente en este contexto de pandemia, la multitudinaria convocatoria de hinchas de Rosario Central y Newell’s Old Boys en la vía pública sin respetar las normas epidemiológicas para prevenir contagios de coronavirus, habla a las claras de una notable irracionalidad humana. El término irracionalidad se emplea generalmente para designar la corriente filosófica idealista que niega a la razón, al pensamiento. Irracional es un adjetivo que se utiliza para calificar a lo que no posee razón o resulta contrario a ella. Son sinónimos de irracional: insensato, disparatado. Y son antónimos: reflexivo, coherente. Es importante expresar que la amígdala es una estructura cerebral que controla nuestras emociones. Y es esta la que interviene en la toma de decisiones. Decidimos emocionalmente. Se dice que las personas racionales presentan una mayor activación en la zona del córtex prefrontal (encargada de la toma de decisiones). Esto significa que pueden manejar las emociones con el fin de tomar decisiones racionales. Las personas irracionales se dejan llevar por las emociones y tienen menor control sobre sus reacciones. Esto es fundamental para entender el porqué del comportamiento humano en determinadas circunstancias de la vida cotidiana.