Candela Rodríguez, la niña de 11 años secuestrada y asesinada en agosto pasado en el partido bonaerense de Hurlingham, sufrió una “violación anal” en las “horas previas” al homicidio, reveló hoy la defensa de Carola Labrador, madre de la víctima.
Candela Rodríguez, la niña de 11 años secuestrada y asesinada en agosto pasado en el partido bonaerense de Hurlingham, sufrió una “violación anal” en las “horas previas” al homicidio, reveló hoy la defensa de Carola Labrador, madre de la víctima.
“Hay una lesión anal importante que quedó registrada en la operación de autopsia y quienes tienen que aclarar la situación son los detenidos”, afirmó el abogado Fernando Burlando, quien representa a Labrador.
El letrado adelantó que pedirá a la Fiscalía de Morón que amplíe los cargos contra los procesados, porque “hubo acceso carnal” y se trata de “una lesión vital y que se produjo en horas previas a su asesinato; algo detestable”.
“Jamás se le recibió declaración a los imputados por el delito de violación. Vamos a ver qué es lo que nos informan los peritos que realizaron la autopsia y luego seguramente le vamos a pedir a la Fiscalía que amplíe la calificación en cuanto a este delito para todos los detenidos”, indicó.
Burlando explicó que la violación es “un elemento importante porque coincidiría con la mecánica que ha utilizado (Hugo) Bermúdez (detenido bajo la acusación de ser el autor material) con distintos familiares, y con Candela”.
De esta manera, el letrado se refirió a los testimonios que surgen del expediente en que allegados a Bermúdez señalaron que el hombre tenía como satisfacción sexual apretarle la nariz y cuellos a las mujeres con quien mantenía relaciones.
Por tal motivo, el fiscal Marcelo Tavolaro, en su pedido de prisión preventiva, lo calificó a Bermúdez de “psicópata sexual”. Burlando admitió que con esta violación “podría cambiar la carátula” de la causa, por lo cual insistió en que solicitará que “se amplíe la calificación” del hecho.
Asimismo, Burlando aseveró que “por el momento” en el secuestro y crimen de Candela “no hay ningún tipo de vinculación de la Policía”, pero sin embargo admitió que “están siendo investigados una serie de policías”.
“Ese trámite es por un legajo secreto, creo yo que todavía tenemos que esperar un poquito más para poder determinar algún tipo de vínculo” policial, analizó Burlando.
Ayer, la Justicia de Morón convirtió en prisión preventiva la detención de seis de los siete arrestados por el caso de Candela, al dar por sentado que el secuestro y el asesinato de la nena se debió a un “ajuste de cuentas no convencional” en venganza del padre de la niña.