Chicos internados también hicieron su promesa de lealtad a la bandera
"Somos una escuela sin mástil, pero de puro amor, dedicada a la educación", dijo su directora, Patricia Clement, para reconocer el gesto oficial de haber hecho parte a sus alumnos.
28 de junio 2014 · 01:00hs
Tamara tiene 7 años y es una paciente oncológica que está internada en el Hospital Centenario. Ayer, junto a un puñado de nenes y nenas con otros padecimientos, no se privó de prometer su lealtad a la bandera patria. El acto, que se viene repitiendo desde mediados de junio por toda la provincia, alcanzó también a los alumnos de la Escuela Hospitalaria Nº 1.391. "Somos una escuela sin mástil, pero de puro amor, dedicada a la educación", dijo su directora, Patricia Clement, para reconocer el gesto oficial de haber hecho parte a sus alumnos de esa iniciativa. El encuentro contó con las presencias de la ministra de Educación de Santa Fe, Claudia Balagué, y de la jefa del Servicio de Pediatría del hospital público, Marcela Gorosito, entre otras autoridades.
Maestras, enfermeras, médicos y familiares también homenajearon a la bandera. Hubo retazos celestes y blancos, escarapelas, mensajes y aplausos. Uno de los momentos más emotivos fue cuando se compartió el video "Banderas del amor". Nadie se privó de cantar y de interpretar nuevamente el tema "Sube, sube". Tampoco de las lágrimas.
La Escuela Hospitalaria fue creada hace más de cuatro décadas. Hasta 2011 era "Hospitalaria y domiciliaria". Al año siguiente sus docentes pasaron a trabajar sólo en el ámbito de los hospitales. En Rosario, en los Zona Norte, Provincial, Centenario y Vilela.
La directora Clement explica que la función principal que tiene esta modalidad es siempre educativa, lo que varía de otras es el abordaje que hacen a la hora de enseñar a los chicos internados. "Ponemos mucha pasión, amor", dirá uno de los maestros de esta escuela, Leandro Silva, quien también compartió el acto con su pequeña hija.
En total son 9 docentes de primaria, una de nivel inicial y tres de materias especiales, los que se reparten para atender a los actuales 170 alumnos de primaria de los cuatro centros de salud.
Un rato antes de la hora acordada ya habían llegado varios de los niños internados a la sala acondicionada para el acto. Entre ellos, Valentín, de 7 años, junto a su mamá Silvia. "El que más me gusta es Messi", respondió sin dudar cuando contó que, mientras se recupera de una grave neumonía, no se priva de mirar el Mundial.
La llegada de la ministra para concretar la promesa de lealtad se hizo esperar más de lo previsible, por eso algunos de los nenes debieron volver a su sala de internación. Entre ellos Valentín.
Más allá de la tardanza, Balagué les manifestó a los chicos y sus familias presentes la preocupación con que trabaja la Escuela Hospitalaria para que los pequeños "sigan integrados" a los aprendizajes. Luego invitó a todos los presentes a renovar el compromiso con la enseña patria. Alexis Olmedo fue el abanderado y lo acompañaron como escoltas Mailén Orduña y Leila Curtis.
Más que satisfecha también estaba la jefa del Servicio de Pediatría, Marcela Gorosito, quien confesó que su sueño siempre había sido un trabajo conjunto, integrado entre Salud y Educación, los dos pilares para que cualquier chico sea feliz. Antes, había manifestado a La Capital que el trabajo de los maestros en el Centenario es clave para "garantizar una recuperación integral" de los pequeños y adelantó que estaban buscando un espacio físico para facilitar la tarea de la Escuela Hospitalaria en el Centenario.Al final hubo torta y chocolate caliente. Al tiempo que un joven violinista, Luciano Jazmín, compartió su música para hacer de la promesa a la bandera una fiesta completa.