Newell's obtuvo un triunfo tan colosal como la cordillera que se observa desde el estadio Bautista Gargantini. La conquista de los tres puntos se asemejó a subir una enorme montaña. Y de ascenso dificultoso. Porque el debut de la Lepra tuvo todos los condimentos para que el triunfo adquiera características casi de hazaña. No es exagerado caracterizarla así. Los golpes y las dudas con las que llegó a la primera fecha le dan un enorme valor a lo sucedido contra la otra Lepra, la mendocina, que sufrió una derrota que no estaba dentro de los cálculos.
Para tener exacta dimensión de la victoria es imprescindible hacer un repaso de cómo llegaba Newell’s, entre otras adversidades con la baja de Keylor Navas horas antes del partido. Un sacudón que, en mayor o menor medida, fue un impacto importante, en especial en el ánimo. Porque quedarse sin una de las principales figuras, por decisión propia, más allá de que se habló de un malestar estomacal, fue un impacto para el grupo.
No se puede pasar por alto que el plantel que debió salir a jugar en Mendoza recién se está conformando. Son las condicionantes con las que se encontró Fabbiani para la definición de los titulares. Con Jherson Mosquera entre los once, pese a que recién se incorporó el jueves. Y sin los incorporados Fabián Noguera y Martín Fernández Figueira por no estar habilitados. En el caso del uruguayo cuesta entender que no haya estado disponible, considerando que está en el club desde hace varias semanas.
Darío Benedetto, al banco de Newell's
A todo esto se le agregó que no pudo contar con Darío Benedetto, con una dolencia muscular, más allá de que fue al banco para hacer número.
Mientras Fabbiani espera más incorporaciones, lo que parecía un alivio el viernes, la vuelta de Keylor Navas, despejando dudas sobre su continuidad en Newell’s, cambió por completo. El domingo mismo se conoció que el costarricense no atajaría contra Independiente Rivadavia. Ni siquiera fue con sus compañeros al estadio.
La realidad es que el arquero faltó porque está decidido a marcharse del club y así lo fueron contando distintas fuentes antes y después del compromiso en Mendoza. Su próximo destino parece ser Pumas de México, aunque habrá que ver cuál es el resarcimiento económico que recibe Newell’s, porque el arquero tiene contrato con el club del Parque.
Esto le agregó un nuevo problema a Newell’s, con incógnitas lógicas sobre cómo le iría en su primera presentación, teniendo en el banco a 11 futbolistas, entre ellos Benedetto, uno menos de lo que se permite.
>>Leer más: A Cocoliso González el VAR le dio revancha cinco meses después de su debut en Newell's
Volvió Barlasina
El reemplazante de Navas fue el arquero Williams Barlasina, al que se le acortó el préstamo con Aldosivi hace pocas semanas para tenerlo de suplente.
Newell’s salió a la cancha disminuido, para enfrentar a un equipo moldeado por Berti y con un funcionamiento consolidado.
El conjunto rojinegro no rindió en el primer tiempo y se fue al descanso en desventaja, por un gol en el que se equivocó Barlasina, quien se reivindicaría, en parte, en los siguientes 45’ con buenas tapadas.
Ante la absoluta adversidad, de lo vivido antes de jugar y de lo sucedido en la cancha, Newell’s tuvo el temperamento necesario para luchar en la segunda etapa. Fue a buscarlo con decisión, el juego de Maroni, el desequilibrio de Herrera, las proyecciones de Martino y la perseverancia de Carlos González.
Una tarde épica
Fue una tarde épica del rojinegro. Que se cristalizó a partir del paraguayo González, que no solo convirtió su primer gol en el club sino que fue el la remontada. Y también de Banega, exponiendo su estirpe para definir con categoría en el segundo. Fue el gol de un triunfo que se gritó con todo.
El fuerte abrazo y las sonrisas de los futbolistas apenas el árbitro Herrera indicó el final fueron la perfecta síntesis del triunfo.
La solidaridad de un grupo que se repuso a las dificultades y cantó victoria.