Por Claudio González
Trucho. Uno de los 28 certificados falsos que secuestró la policía.
A partir de una denuncia anónima a la unidad fiscal especializada para investigar el incumplimiento de la cuarentena, se comprobó que en un domicilio de la zona sur de Rosario confeccionaban y comercializaban certificados truchos para sortear los controles impuestos en la circulación a partir del aislamiento obligatorio. En un operativo de entrega controlada fueron detenidos dos hombres de 35 y 37 años. Les incautaron máquinas y computadoras para estampar códigos QR. Los vendían a 500 pesos.
Todo comenzó cuando un hombre detectó que en la red social Facebook se ofrecía la confección de certificados supuestamente legales donde figuraban actividades exceptuadas para circular en el marco de la cuarentena obligatoria que rige desde el 20 de marzo.
En Facebook, Marcelo Ronco (identidad falsa) fijaba en su muro con absoluta impunidad: "Tramito permisos de circulación totalmente legales", y solicitaba a quienes demostraran interés para tramitarlo, que le remitieran fotocopias de "ambas caras del DNI, correo electrónico y número telefónico de contacto". Y tarifaba en 500 pesos la extensión del certificado.
Como el denunciante sospechó que se trataba de una actividad ilegal, el lunes a la noche hizo una presentación espontánea en la Fiscalía Especializada Covid-19, donde acompañó capturas de pantalla de los posteos en el muro de Ronco.
El fiscal Mariano Ríos comenzó a investigar el caso, rastreó los datos, ubicó un domicilio y con la colaboración de personal de la Agencia de Investigación Criminal (ex PDI) organizó un operativo encubierto para contactar a los supuestos estafadores. Luego concretó lo que se denomina una entrega controlada.
"Te puedo llegar a poner como transporte de mercadería, podría ser algo de eso. Ahora me fijo. Ese permiso te lo genero sí o sí, quedate tranquila, que es lo importante. Te pondría algún rubro así", dice uno de los hombres encargados de la confección de los certificados en una escucha telefónica captada por los investigadores. Y remata: "En el momento que te paren, vos decís que la mercadería ya la entregaste. Hay un ítem que abarca transporte público y transporte de mercaderías, te pondría en ese".
Un agente policial vestido de civil se hizo pasar por interesado, sirvió de señuelo y obviamente aclaró que no estaba comprendido en ninguna de las excepciones para circular, pero que necesitaba un certificado. Entonces se montó vigilancia sobre una vivienda de calle Boman al 3000 (bulevar Oroño al 5200), en la zona sur de la ciudad.
De allí salió un hombre que el martes, entre las 19.30 y las 20, se encontró con el interesado en Lamadrid y Ovidio Lagos, donde finalmente quedó detenido in fraganti cuando hacía entrega del documento y percibía los 500 pesos. Su socio (sería el cuñado) también fue arrestado dentro de la casa, donde funcionaba un taller mecánico y otro de fotografía.
En el lugar se incautaron computadoras, una máquina para diseñar códigos QR y 28 certificados apócrifos. Las personas detenidas fueron identificadas como Hernán M., de 35 años, y Ariel G., de 37. Ambos serán imputados por la falsificación de instrumento público y violar las disposiciones nacionales dispuestas para impedir la propagación de la pandemia de coronavirus.