Personal del Observatorio Volcanológico de los Andes del Sur chileno sobrevoló ayer a la tarde la zona del volcán Puyehue, que está en erupción desde hace dos semanas, oportunidad en la que detectó que la lava ya alcanzó la superficie. Los especialistas adelantaron que se mantienen las posibilidades de una erupción de gran intensidad por la obstrucción de conductos del macizo por el magma.
Los especialistas precisaron que se está volcando "una colada de lava viscosa", que brota del volcán y cae por la ladera oeste y fluye por un canal de aproximadamente 50 metros de ancho por 100 metros de largo. La columna de cenizas varía entre 3 y 5 kilómetros de altura, que en función de los vientos variables son trasladadas en distintas direcciones.
La pluma volcánica ayer se dirigió predominantemente hacia el sureste y para hoy estimaron que reforzará su camino hacia el este y probablemente hacia el noreste, es decir que se aleja del lado argentino.
Asimismo, se señaló que continúa la actividad sísmica a un promedio de dos sismos por hora, con señales de tremor por momentos de gran intensidad, lo que, sumado a otros indicadores, significa que se mantienen las posibilidades de un evento explosivo, debido a posibles obstrucciones del conducto por la lava emitida o cambios en la dinámica de la erupción. De igual manera puede aumentar la emisión de materiales. Ese panorama llevó a los organismos especializados chilenos a sugerir que se mantenga el alerta rojo para todas las poblaciones circundantes al complejo volcánico.
En el lado argentino, la ciudad de Villa La Angostura, una de las más afectadas por la ceniza volcánica, seguía ayer en alerta roja, aunque inició su fase de rehabilitación tras la caída de "más de cuatro millones y medio de metros cúbicos" de polvo, dijo el vocero de Defensa Civil de Villa La Angostura, Ariel Domínguez.
Destacó que en La Angostura "seguimos con alerta roja. Se adelantaron las vacaciones escolares, no hay actividad educativa y se pidió que todo el que pueda viajar lo haga y se descomprima la situación social".
La emergencia generada por las cenizas "provocó un parate total" en la ciudad, sostuvo el funcionario, y remarcó que desde el inicio de la crisis "no tuvimos que lamentar pérdidas humanas. De hecho, de los cuatro centros de evacuación previstos sólo tuvimos que utilizar uno y con 14 personas".
Domínguez destacó que en ese marco "se está devolviendo el suministro de energía de a poco porque siguen las tareas de protección de aislantes en los transformadores del servicio".
Reanudan los vuelos a la Patagonia
La disminución de la cantidad de cenizas suspendidas en el aire permitió en las últimas horas que varias compañías reanuden sus vuelos a localidades de la costa patagónica, mientras siguen sin operar los aeropuertos de San Carlos de Bariloche y de Neuquén.
En ese marco, la empresa LAN Argentina informó que hoy a las 8 reanuda sus operaciones hacia Río Gallegos, donde los servicios estuvieron interrumpidos desde el 4 de junio por las cenizas.
Asimismo, la compañía Aerolíneas Argentinas indicó que también reanuda hoy sus servicios diarios a la ciudad de Mar del Plata.
Las dos empresas retomaron el fin de semana sus vuelos a Bahía Blanca, donde también debieron ser suspendidos por la presencia de cenizas, mientras Aerolíneas reanudó anteayer sus operaciones a Ushuaia y Río Gallegos a través de la ruta del Pacífico.
Aerolíneas aseguró que los vuelos internacionales se cumplen con la programación prevista, a excepción de la ruta Auckland/Sydney que está inoperable por la nube de cenizas en ruta y el cierre del aeropuerto de la ciudad australiana.
Australia, con aviones en tierra
El aeropuerto de Sydney, el más importante de Australia, fue cerrado ayer debido al retorno de la nube de cenizas volcánicas procedentes de Chile. En tanto, los vuelos con destino a Londres o Fráncfort fueron adelantados para evitar la nube de cenizas y los aterrizajes fueron desviados a Brisbane.
La mayor compañía aérea australiana, Qantas, tuvo que suspender 200 vuelos ayer y todo el tráfico aéreo previsto para hoy en Sydney, Melbourne y Canberra.
También cancelaron sus vuelos las compañías Virgin y Tiger Airways, ya que “según la oficina de meteorología la nube de cenizas llegará hasta los 20.000 pies (unos 6.500 metros) lo que impide el tráfico aéreo”, informó la empresa aérea Virgin.
Los expertos del organismo señalaron que la nube de cenizas se mueve con rapidez,