El ahora ex titular de Anses, Mariano de los Heros, cometió el peor pecado que puede cometer un funcionario del gobierno nacional: hablar de algo que no quiere el presidente Javier Milei. No fue gratis, por supuesto, y su cabeza rodó al instante.
Mariano de los Heros terminó eyectado del organismo luego de que adelantara las intenciones del gobierno de una modificación previsional. El enojo del presidente
Milei echó al titular de la Anses
El ahora ex titular de Anses, Mariano de los Heros, cometió el peor pecado que puede cometer un funcionario del gobierno nacional: hablar de algo que no quiere el presidente Javier Milei. No fue gratis, por supuesto, y su cabeza rodó al instante.
El presidente confirmó sin ningún tapujo que el despido obedeció a las referencias realizadas por el ahora ex funcionario respecto de la posibilidad de una reforma en el sistema previsional en pleno año electoral.
El funcionario reveló en declaraciones a TN que el gobierno nacional buscará impulsar una reforma previsional “antes de fin de año” y en ella se aumentaría la edad mínima para acceder a la jubilación.
“Lo que tenemos que discutir es el régimen previsional, que es lo que anticipó el Presidente, antes de fin de año, y constituye el punto 9 del Pacto de Mayo. Creo que la Argentina se merece una reforma previsional completa porque el sistema, tal como lo han dejado, está quebrado”, dijo. Clarín lo puso en tapa y la historia quedó escrita.
“La agenda política la fijo yo, no un funcionario de segundo orden”, dijo el jefe de Estado y enfatizó que de los Heros “voló por los aires, como corresponde”. “Lo eché porque no tenía por qué hablar de un tema que no está en agenda. ¿A título de qué?“, se preguntó en forma retórica el presidente, con su estilo, sin ocultar su malestar.
El mandatario se refirió al último movimiento en un área de primera línea del Gobierno nacional durante un diálogo telefónico con Radio Rivadavia. “La agenda política la determino yo, no un funcionario de segundo orden”, insistió y luego se explayó en los fundamentos de la decisión.
“La reforma previsional no puede pensarse si antes no se arregla la cuestión laboral. Tengo el 40% del segmento de la mano de obra en el sector informal. Es un disparate, primero tengo que corregir los desequilibrios que nos dejó el kirchnerismo cuando nos robaron las jubilaciones”, explicó Milei.