La Red de Infarto de Rosario, un sistema integrado por distintas áreas de la salud pública municipal y provincial y coordinado por un equipo de cardiólogos del Hospital Centenario cumple diez años, un período en el cual dieron respuesta a más de 2.000 personas que cursaban un ataque cardíaco.
La evaluación que hacen los profesionales que desarrollaron esta propuesta a lo largo de diez años es "muy buena". La mortalidad se ubica en el 7% "que es baja para nuestro medio donde se ubica en el 15%", señalaron.
En la Argentina, y Rosario no está al margen, el infarto tuvo un incremento considerable entre 2019 y 2021 en mujeres y hombres menores de 60 años. Lo más frecuente es que ocurra en adultos mayores pero pueden padecerlo personas jóvenes. Por eso es importante conocer los modos de prevención y las señales de alerta.
La enfermedad cardiovascular es la principal causa de mortalidad en el país. Incluso en las mujeres. Se produce cuando una región del músculo cardíaco es afectada por la obstrucción de una arteria coronaria. Si pasa demasiado tiempo el tejido muere de forma irreversible, pudiendo provocar el deceso del paciente o dejando lesiones graves y discapacidad.
Un sistema armado en 2014
El equipo de cardiólogos del Servicio de Hemodinamia y Cardioangiología Intervencionista del Centenario junto a especialistas de todos los hospitales públicos de Rosario decidieron armar este sistema en 2014 para llegar a tiempo y salvar más vidas. Pedro Zangroniz, jefe de Hemodinamia y a cargo de Cardiología del hospital y uno de los principales promotores de la Red, dijo a este diario que en estos años de funcionamiento "se atendieron unos 2.000 infartos". Destacó que antes de la puesta en marcha de esta modalidad se alcanzaba a dar respuesta a unas 50 personas por año y que el crecimiento fue progresivo: "Pasamos a 100, luego 150 y ahora estamos en unos 250 procedimientos por año".
El médico destacó el apoyo de las sucesivas gestiones provinciales y municipales para sostener el sistema durante una década.
Un dato relevante: en 2020 y 2021 llegó al hospital un 20% menos de pacientes. La pandemia estaba en pleno desarrollo y muchas personas evitaron acercarse a los centros de salud aun con síntomas cardíacos. "No sabemos qué fue de esos pacientes", reconoce con preocupación el médico, quien aseguró que en estos últimos años se propusieron como meta volver a poner el sistema en funcionamiento a pleno y alcanzar a toda la población que lo requiere.
Recibir atención rápida y un tratamiento correcto es lo que permite salvar la vida o darle las mejores posibilidades a quien cursa un infarto de miocardio. El mayor objetivo de la Red establecida entre los hospitales de la ciudad es permitir ofrecer al paciente un acceso lo más inmediato posible al centro de atención más capacitado para solucionar su problema. "La Red cumple 10 años de trabajo y se pueden ver sus logros", mencionó Zangroniz.
Simposio de Cardiología en Rosario
En el marco del Congreso de la Federación Argentina de Cardiología (que comienza el jueves 30 de mayo en Rosario en Metropolitano) se realizará un simposio precongreso que tendrá lugar este miércoles 29 desde las 13 y en el que se abordarán las novedades en el tratamiento inmediato de pacientes con infarto.
Durante toda la jornada, además, habrá charlas en las que se analizará el trabajo de la Red de Infarto desde sus inicios hasta la actualidad y se compartirán experiencias con equipos médicos de todo el país y el exterior. Las actividades, que contarán con una decena de expositores con amplia experiencia, se realizarán en la facultad de Ciencias Médicas de la UNR.
"Muchas cosas importantes sucedieron en esta década de experiencia, una de ellas es que fuimos mejorando los tiempos de atención desde que consulta el paciente hasta que se le hace la intervención. Ese tiempo fue disminuyendo en forma considerable a medida que afianzábamos el mecanismo de funcionamiento de la Red", mencionó Zangroniz.
"Todo mejoró. El traslado del paciente a través del Sies y todo el sistema que se llama de preactivación", destacó.
El especialista, quien además es profesor de la UNR, señaló que el tratamiento más adecuado (en tanto y en cuanto esté disponible de manera rápida) para un individuo que tiene un infarto es la angioplastia coronaria con implante de stent. "Es lo recomendable en la mayoría de los casos".
Consiste en hacer un cateterismo de urgencia, detectar la arteria ocluida y destaparla colocando un stent. Si no se cuenta con este recurso las posibilidades de recuperación se reducen, a pesar de que existen otros tratamientos como administrar drogas que disuelven el coágulo que tapa la arteria (llamados trombolíticos) pero no son tan efectivos sino se aplican rápidamente.
Diez años después de la formación de la red de atención de personas con infarto en hospitales públicos rosarinos, pueden mostrar resultados concretos: se incrementó el 300% el número de pacientes tratados con intervención coronaria percutánea (más conocida como angioplastia) en personas con Infarto agudo de miocardio y elevación del segmento ST (que implica un riesgo de mortalidad elevado), y se redujeron los tiempos de atención desde la llegada del paciente al hospital hasta su intervención.
El equipo, que se denomina Grupo Integrado de Trabajo Municipal y Provincial para mejorar el tratamiento del infarto agudo de miocardio, inició sus actividades con reuniones mensuales tanto con los referentes de los hospitales como con el sistema de emergencias y también con autoridades municipales y provinciales. "Se redactó un protocolo de trabajo e iniciamos las tareas de capacitación a médicos de guardia, médicos de ambulancias y estudiantes del último año de Medicina", explicó el profesional.
Uno de los grandes desafíos era superar dos problemas que existen en el tratamiento del infarto y que pueden comprometer la vida del paciente: la demora en la llegada de la persona a un centro de salud cuando tiene un infarto, y el hecho de que no arribe a un hospital que pueda brindarle el mejor tratamiento en el menor tiempo.
Antes de iniciar esta modalidad de trabajo muchos pacientes llegaban al área de hemodinamia del Centenario derivados de otros centros o del Sistema de Emergencias, pero sin ningún tipo de organización ni planificación.
"Ahora, desde las guardias de los Hospitales que forman parte de la Red son derivados de manera directa (se llama pre activación) a la Sala de Cateterismo del Hospital Centenario, sin pasar por la guardia ni por la Unidad Coronaria. Son ingresados sin demoras para tratar la obstrucción", detalló Zangroniz.
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Cuáles son los síntomas de un infarto
Aunque no todas las personas lo experimentan del mismo modo, hay señales que no se pueden dejar pasar. Una de ellas es el dolor en el pecho, que se siente como una opresión. El dolor, explica el médico, puede o no irradiarse hacia el brazo izquierdo.
Hay quienes además tienen palpitaciones, dificultad para respirar y mareos. Pero en todos los casos es necesario hacer una llamada en forma inmediata al servicio de emergencia o concurrir a una guardia médica, ante la sospecha de un infarto. Los médicos harán una evaluación y un electrocardiograma que determinará la gravedad del cuadro. "El tiempo de traslado y del inicio del procedimiento médico es crucial", insistió el cardiólogo.
La enfermedad cardiovascular es la primera causa de muerte en el mundo, al igual que en Rosario. Los problemas cardíacos aumentan de la mano de las enfermedades no transmisibles como la diabetes, la dislipidemia (aumento del colesterol y triglicéridos), la vida sedentaria, el tabaquismo, por eso, "es preciso insistir en tomar medidas para mejorar hábitos y hacerse los chequeos adecuados de acuerdo con edad, antecedentes y modo de vida".