Un temporal de nieve cubrió ayer la zona cordillerana de Bariloche y Villa La Angostura, y complicó más aún la situación de la población, que desde el 4 de junio soporta la erupción del volcán chileno Puyehue y toneladas de arena volcánica en calles y casas, que ahora será más difícil sacar porque quedó debajo del manto níveo.
Las nevadas se presentaron con intensidad entre las 9.30 y las 11, y regresaron en forma intermitente por la tarde, generando una leve acumulación en los barrios del oeste de Bariloche y en toda Villa La Angostura.
Los pronósticos indican que el frente frío del sur continuará sobre la región hasta hoy, tras lo cual se espera un descenso de la temperatura a mínimas de hasta 7 grados bajo cero.
En Bariloche y su zona de influencia recomendaron extremar las precauciones en el tránsito por rutas y calles de la región.
La acumulación de cenizas primero, y la de nieve ahora, podrían complicar el tránsito vehicular por varios días. Vialidad Nacional recomendó transitar con suma precaución en rutas como la 231, entre Villa la Angostura y Bariloche.
Lo mismo en la ruta nacional 40, entre Bariloche y su continuidad hacia Piedra del Aguila por la ruta 237. Lo mismo en el tramo entre Bariloche y El Bolsón. La recomendación apuntó a transitar a baja velocidad, no superando los 40 kilómetros por hora en los sectores más críticos. También Vialidad aconsejó portar cadenas para las ruedas, llevar las luces encendidas y elementos de seguridad en Bariloche, donde en algunos sectores se habían acumulado unos 10 a 15 centímetros de nieve.
Por su parte, el organismo chileno Sernageomin informó que el complejo volcánico chileno Puyehue-Cordón Caulle "disminuyó o cesó" la emisión de lava, además de mostrar una merma en el registro de "tremores", sonidos que manifiestan su actividad interna; aclarando que aún puede presentar "eventos explosivos", aunque no tan importantes como los originales del 4 de junio pasado.
En tanto, el Consejo de Educación de Río Negro aseguró ayer que fue completada la limpieza de cenizas y arenas volcánicas en los establecimientos de Bariloche, por lo que se reanudaron en forma normal las clases en todos los niveles.
El último de los edificios reacondicionados desde la erupción del complejo volcánico chileno Puyehue-Cordón Caulle fue el Jardín 17, que fue puesto en condiciones para su reapertura.
De esta manera las clases volvieron a la mayoría de los 85 establecimientos de Bariloche, con la excepción de nueve centros educativos que adelantaron el receso escolar invernal.
Una buena noticia. La nevada complica las tareas de limpieza de arena y cenizas volcánicas, pero también renovó el optimismo de la zona, puesto que es un ingrediente esencial en la temporada turística de invierno.
Paula Gómez, gerenta general del complejo Catedral Alta Patagonia, dijo que "esta nevada es una muy buena noticia y, aunque aún esperamos más nieve, ya nos pone en las puertas de la apertura de la temporada de esquí".
La directiva destacó que "hoy (por ayer) ascendió a Catedral el primer contingente de turismo estudiantil, que fue recibido por la nevada y pudo disfrutar de un cerro que está hermoso".
Un panorama similar se vivió en el cerro Bayo, donde la infraestructura está en condiciones de abrir la temporada, en tanto aguardan que la meteorología continúe en esta dirección y el volcán disminuya aún más su actividad.
Fernando Fal, encargado de Comunicación del centro de esquí, señaló que "la nevada es muy bienvenida porque al menos devuelve a Villa La Angostura uno de sus colores más lindos, el blanco".
Por otra parte, el Club Andino Bariloche (CAB) presentó un informe técnico sobre el efecto de las cenizas volcánicas en la nieve, basado en estudios en los cerros Catedral y López, y aseguró que "no perjudican la práctica de deportes invernales". Las cenizas contribuyen en la formación de algunas nevadas en condiciones meteorológicas donde no se produciría nieve, siendo estas más húmedas e intensas que lo esperado. (Télam y DyN)