Uno. Diez. Cincuenta. Más de cien. La sala Auditori 1899 plena. Periodistas de todos los medios. De todas partes. De todas las lenguas. Muchas cámaras. Expectación. Entusiasmo. Nerviosismo. Ansiedad. Un día esperado, para vivirlo con intensidad. Para observar los detalles y guardarlos en la memoria. Una pantalla gigante con la imagen del Camp Nou. Un cartel que reza “Benvingut Tata”. O “Bienvenido Tata” en el idioma que se quiera leer. Una puerta que se abre. Y un hombre que aparece. Los flashes se centran en su rostro blanco marcado por el invierno argentino. No es un hombre cualquiera. Se trata del hombre. Del entrenador del que se estuvo hablando todo este tiempo. Del técnico que salió de una ciudad llamada Rosario y sin escalas aterrizó en Barcelona. Se trata nada menos que del hombre que se hizo conocido mundialmente en tan sólo un par de días. En un abrir y cerrar de ojos. Ese hombre camina lentamente para presentarse oficialmente ante la prensa y ante el planeta como el nuevo entrenador del Fútbol Club Barcelona. Ese hombre sonríe. Saluda. Está nervioso. Como para no estarlo. Pero se lo ve firme. Seguro. Ese hombre se muestra como es. Auténtico. Honesto. Amante del fútbol. Ese hombre se llama Gerardo Martino. El Tata de Newell’s que ayer se convirtió oficialmente en el nuevo entrenador del Barcelona de Messi. Al Tata le llegó su gran día. Un día que quedará grabado en su historia. Y en la historia del fútbol rosarino.
Calor en Barcelona. El Camp Nou está plagado de turistas. La gente se aglomera para entrar en el museo. La tienda de la marca que lleva la indumentaria del Barsa no para de vender. Dicen que es la que más vende en el mundo. Muchos turistas caminan, sudorosos, de un lado a otro del gran complejo deportivo del club catalán. A pocos metros de allí se erige el Auditori 1899, un gran salón de actos, preparado para la presentación de Martino. Los periodistas ya están adentro esperando por la salida del Tata. Con una puntualidad inglesa comienzan a salir a escena los protagonistas. Primero aparecen Elvio Paolorosso y Jorge Pautasso, sus hombres de confianza. Ambos se sientan en la primera fila y se quedan a la espera del protagonista. No tarda mucho en salir Martino. Acompañado por el vicepresidente del club Josep Maria Bartomeu, y el director deportivo, Andoni Zubizarreta, el Tata se presenta oficialmente ante los medios del mundo. Hubo tiempo para todo. Y para todos. Andoni Zubizarreta se explayó sobre la situación que llevó al Barcelona a confiar en Martino. Habló de lo difícil que fue asumir la noticia sobre la recaída en la enfermedad de Vilanova y cómo dentro de ese cuadro duro en el aspecto humano se comenzó a buscar un reemplazante.