Gestión o ideología, qué garpa más en Provincias Unidas y el peronismo

Pullaro busca una campaña sin ideologías y con gestión. El peronismo va por el sendero de la esperanza y progresismo. Polarización en cancha

06:05 hs - Lunes 06 de Octubre de 2025

Provincias Unidas tiene un doble rival: el peronismo y La Libertad Avanza. Y un desafío extra: hacer equilibrio entre esas dos fuerzas pero sin quedar como una insulsa avenida del medio. Sin embargo, a 20 días de las elecciones y con el mileísmo desdibujado en Santa Fe, empezó a polarizar con el peronismo, que no le corre el cuerpo al convite.

El discurso que practica el sello de los gobernadores es gestión mata ideología, algo que choca directamente contra la dogmática La Libertad Avanza que ni siquiera corta el pasto de las rutas nacionales, pero también con el peronismo que vende algo más abstracto como esperanza y lucha para un cambio.

“Provincias Unidas no es una avenida del medio. Esto no es ideológico, tiene que ver con la gestión y la defensa de la producción”, explica Pullaro a La Capital. Así, para diferenciarse de ambos espacios políticos, el sello de los gobernadores usa la desideologización.

Provincias Unidas y el PJ

La vicegobernadora y candidata a diputada de Provincias Unidas, Gisela Scaglia, lo aplica al mileísmo: “El equilibrio fiscal es una discusión sobre gestión pública, no ideológica, porque el tema es la sensibilidad para gestionar un país: superávit fiscal, sí, pero hay que agregarle para qué: para mejor educación, seguridad, para mejorar el personal de discapacidad”.

Desde el supuesto que el kirchnerismo “no vuelve más", sostienen que la “salida” es a través de Provincias Unidas: “gobernadores con mirada de gestión, productiva y sin debates ideológicos”, repiten como un slogan.

Por eso van a lo concreto y palpable como la inauguración de la pavimentación total de la ruta 3 con una travesía motoquera. Hubo un detalle: el gobernador condujo una moto de la policía con las sirenas prendidas. Todo un gesto que desafía los cuestionamientos ideológicos progresistas sobre la autoridad. Igualmente, en su intento de desideologizar hay ideología.

Hay más. En la semana, en el acto de Provincias Unidas se refirió a la candidata de Fuerza Patria, Caren Tepp, como “La mujer de Juan Monteverde que quiere edulcorar al peronismo”. Jugó una carta sensible para la ideología progresista.

Tepp reaccionó rápido con un video en el que retoma el mensaje “la fuerza de las mujeres” que tuvo fuerte auge en su momento. Parece hablarle a su núcleo centroizquierda y el kirchnerismo, no al peronismo tradicional.

Así, con una controversia como combustible, el juego mutuo de la polarización estaba en marcha.

WhatsApp Image 2025-10-05 at 12.47.20

El gobernador Maximiliano Pullaro de Provincias Unidas en una moto de policía

Scaglia redobló: “Tepp es la mujer de los dos Juanes, de Juan Monteverde y Juan Grabois”, dijo la encargada de "desideologizar" la respuesta de Tepp con algo de exceso declarativo. Si vamos a tensar, tensemos, parece decir.

De esa manera la emparentaba con la pertenencia política del dirigente de la economía popular, pero también la frase sugería dependencia de Tepp en un hombre para hacer política sin mérito propio. Indignaciones al margen, la estrategia electoral de polarizar fuerte está clara y es directa.

Ahí está justamente lo que propone la vice: ya no es tiempo del colectivo femenino, a quien dijo no escucharlo “en algunos temas que son muy duros para el país”. De nuevo: en su intento de desideologizar hay ideología.

Seguridad

La lucha contra la inseguridad es un tema en el que la ideología cruza de lleno. El plan Pullaro no se detuvo en cuestionamientos de garantismo (incluso combatió el concepto) y el gobernador se sube con orgullo a la moto policial. Con eso logró éxito en la reducción de los índices de delitos y violencia que eran un drama para Rosario. Fin, dirán. En ese tópico el peronismo pierde. Por eso no menciona el tema en campaña, mucho menos desde un enfoque progresista.

Provincias Unidas lo utiliza como ejemplo de gestión resolutiva. “La gente votó y cambió. Apareció un gobierno provincial con un método de administrar la seguridad y cambió la realidad. La ciudad ya no tiene nada que ver con los 300 muertos por años que tenía”, pasó en limpio Scaglia.

La campaña de Tepp se enfoca en conectar con la angustia y vender esperanza, que encuentra su propósito teórico en una actualidad pésima: "Convertir la decepción en esperanza, esa es la tarea. Y tenemos que hacerlo juntas y juntos". El peronismo intenta interpretar un estado de ánimo.

Claramente son tiempos de argentinos desahuciados, peleados con la política, y que demandan a la dirigencia. Hay dos cuestiones sobre la mesa santafesina: resultados tangibles y promesas de un futuro mejor. Así se polariza y se le da un chispazo necesario a la campaña santafesina.