Los candidatos a ganar los premios Golden Globe en su 65ª edición lustraban anoche con los dientes apretados su suerte sentados frente al televisor, tras suspenderse la gala de entrega de los galardones en Los Angeles por la huelga de guionistas.
Los candidatos a ganar los premios Golden Globe en su 65ª edición lustraban anoche con los dientes apretados su suerte sentados frente al televisor, tras suspenderse la gala de entrega de los galardones en Los Angeles por la huelga de guionistas.
Desde que en 1943 la Asociación de Prensa Extranjera en Hollywood entregara los primeros Globos, nunca había abortado su gala como sucedió este año por la huelga del Sindicato de Guionistas, que la convirtió en una rueda de prensa pautada para los primeros minutos de hoy en el hotel Hilton de Beverly Hills.
En un giro inesperado para los jerarcas de la industria del cine hollywoodense y de los organizadores de estos premios, el Sindicato de Actores anunció un boicot al evento en señal de apoyo con sus "hermanos y hermanas guionistas en huelga" desde el 5 de noviembre, barriendo así el brillo de las 72 estrellas nominadas entre las 25 categorías de esta fiesta.
La cancelación es aún más seria en términos económicos. La venta fallida de espacios publicitarios, derechos de transmisión y "productos comerciales derivados", como prensa rosa, diseñadores, joyerías y restaurantes, dejó un tendal de pérdidas.
Así las cosas, decenas de estrellas del celuloide y la TV estaban anoche acomodados junto a amigos en un hotel o un bar, esperando frente a la pantalla chica si su nombre resulta vencedor de la 65 entrega de los Globos de Oro en su formato de "noticiero". l
Por Mariano D'Arrigo