"Rosario nos costó, la primera vez que vinimos metimos veinte personas"

Miguel Del Sel, Dady Brieva y El Chino Volpato pasaron por Rosario con la excusa de la presentación de "Midachi Kindon", para hablar sobre el espectáculo y, una vez más, para reirse un rato recordando viejas anécdotas.

Después de 34 años juntos, los humoristas aseguran que se siguen divirtiendo juntos arriba del escenario y reconocen que la primera vez que actuaron en Rosario tuvieron solamente veinte espectadores.

—¿Cómo se hace reír?

—(Del Sel) El show está armado para hacer reír. Hace 34 años que tenemos este oficio que nos dio de comer y nos alegró la vida. Este show está fenomenal. La política no hace mella en nuestro comportamiento personal ni grupal. No tenemos problema con la política, pensamos distinto pero somos amigos de toda la vida.

—(Dadi) Siempre nos separamos y nos juntamos cuando cabió. Nos hemos separado y después nos juntamos cuando se dio la oportunidad, después vemos.

—(Chino) Esa que siempre fue la esencia de Midachi. Alguna vez nos tildaron de que eramos una estudiantina, con el tiempo la estudiantina se profesionalizó y empezamos a usar otro tipo de herramientas. No deja de ser la esencia del principio, de permitirnos todos y que cada uno tenga la capacidad de hacer y deshacer, siempre y cuando divierta a la gente.

—(Dadi) La gente no se ríe porque nosotros hicimos un chiste, se ríe porque nos ve y cree que somos felices. Nosotros vendemos energía, un estado de ánimo. ¿Por qué no hay otro que pueda decir lo que dice Landriscina, por qué Seinfeld puede escribir seiscientos guiones y los decís vos, los dice el verdulero? Porque son guiones, pero cuando vos vendés un estado de ánimo tenés que ser muy creíble. Sino es como disimular un pedo. La gente se cree que nosotros la pasamos bien.

—(Del Sel) ¡Porque la pasamos bien! Yo no termino bien de la garganta de tanto reírme.

—(Dadi) Rosario es un gran barrio de Buenos Aires (risas).

—(Del Sel) Rosario nos costó, la primera vez que vinimos metimos veinte personas...

—(Chino) Pero no nos costó hacer reír sino atraer a la gente. Estábamos en el Hotel Presidente y a la noche, después de una función que habíamos hecho, empezaron a aplaudir. Y decíamos: "Mirá, las chicas, cómo gritan...". Estaba Soda Stereo en el hotel.

—(Del Sel) Hicimos una gira por Latinoamérica sin haber pasado por Rosario...

—(Chino) Así que, si acá nos fue mal, imagínense cómo nos fue afuera.

—(Del Sel) Cuando llegamos lo vendimos como que nos había ido bien. ¡Nos queríamos suicidar!