La vedette Moria Casán recuperó hoy su libertad luego de declarar ante una fiscal de Paraguay que la interrogó sobre la desaparición de joyas que le prestaron para un show, tras lo cual se ordenaron las detenciones de dos de sus allegados, Luciano Garbellano y Alexis “Galo” Soto.
Así lo reveló la fiscal Celeste Campos Ross, quien investiga la desaparición de joyas denunciada por el comerciante Armando Benítez que reportó el faltante de un collar de diamantes y zafiros y un par de aros valuados en 80 mil dólares.
Casán minimizó el arresto que la obligó a pernoctar en una comisaría de Asunción del Paraguay y anunció que entablará una contrademanda contra el joyero al estimar que podía buscar el posible cobro fraudulento “de un seguro”.
La fiscal Campos Ross aclaró que la vedette seguirá afectada a la investigación y la autorizó a regresar a Buenos Aires. En tanto, el abogado del joyero, Carlos Rodríguez, señaló a Casán como “cómplice” de la desaparición porque “está omitiendo como fueron los hechos reales”.
El letrado dijo que cuando Benítez ingresó con una escribana al camarín, Casán “no tenia la gargantilla, ella se desentiende” y en ese instante, acotó, el socio de la vedette “Luciano (Garbellano) y su otro colaborador están saliendo del camerino y Luciano inclusive le da un abrazo y beso a Armando”.
Rodríguez afirmó, en diálogo con C5N, que “ella lo facilitó, ella sabe como viene la mano y tampoco lo denuncia públicamente. No hizo denuncia formal respecto de la sustracción”.
“Está omitiendo como fueron los hechos reales, hay un acta notarial de lo que aconteció, lo que se escuchó y lo que se dijo” en ese momento, se quejó el letrado.
La vedette, cuyo nombre real es Ana María Casanova, consideró que el arresto que sufrió tras la desaparición de las joyas en Paraguay era “un disparate” porque, insistió, “el que nada debe, nada teme”.
“Vengo a poner cosas en Paraguay no a sacar”, dijo la actriz que garantizó su regreso para mañana a Buenos Aires, donde debe asistir al show de Marcelo Tinelli en canal 13 para oficiar su rol de jurado de baile.
Al minimizar el incidente, añadió en tono irónico que las alhajas “eran berretas” por le “provocaron alergia” y evitó dar respuestas sobre Garbellano al señalar que “si lo buscan está acá, tiene casa en Paraguay”.
Casán, quien pasó la noche detenida en la comisaría de la mujer de Asunción del Paraguay, contó que el jueves “termine de trabajar puse mis joyas en una caja, empezó a entrar gente que me vino a saludar y las cosas desaparecieron”.
El joyero Benítez, por su parte, aclaró que no podía acusar directamente a la actriz por el faltante y remarcó: “Yo no creo nada, lo único que sé es que desapareció el collar”.
“Le presté el collar para que lo luzca con la condición de que lo devuelva en el camarín cuando terminara el espectáculo. Cuando voy al camarín ella ya no tenía el collar, eso es todo”, resaltó el joyero.
Además, recordó que le “llamó la atención esto” y reveló que intentó comunicarse “con Luciano Garbellano y él me decía que tenía amigos en Paraguay, que me tranquilice que todo se va a arreglar” pero al día siguiente radicó la denuncia policial.
El cónsul argentino en Paraguay, Claudio Di Gregorio, visitó a la vedette en la comisaría anoche y esta mañana cuando ratificó que “pasó muy bien la noche” en la seccional donde durmió “en un sofá”.
Alberto Ojeda, abogado paraguayo que representa a Casán, destacó que se encontraban “a disposición de la justicia” para que se esclarezca el caso caratulado como “investigación fiscal sobre un supuesto hecho de apropiación”.