Con la fiebre rockera de “Start me up”, la legendaria banda británica The Rolling Stones arrancó anoche, pasadas las 21, otra seguidilla de shows históricos ante 53 mil personas que colmaron el Estadio Unico de La Plata, en su cuarta visita a la Argentina, en el marco del América Latina Olé Tour 2016.
La mítica figura de Keith Richards apareció en el escenario, minutos después de que parara mágicamente de llover, para disparar desde su guitarra los primeros acordes del himno stone grabado en 1981, con la entrada de un electrizante Mick Jagger, vestido con pantalón y remera negros y un saco verde.
Luego lo siguió “It’s only rock and roll (but i like it)”, en donde Keith Richards metió un solo notable que le permitió ganarse una gigantesca y emotiva ovación.
Mientras sonaban las primeras canciones, en las gigantescas pantallas podían verse imágenes y videos sobre la gira por América latina, los cambios a lo largo de la historia del logo de la lengua, dibujos eróticos y de curvilíneas chicas rockeras.
El combo compuesto por Jagger, Richards, el guitarrista Ron Wood y el baterista Charlie Watts contó en escena con el respaldo del bajista Darryl Jones; los tecladistas Chuck Leavell y Matt Clifford; Tim Ries y Karl Denson, en bronces; y los coristas Bernard Fowler y Sasha Allen.
Luego de “Tumbling Dice”, Jagger lanzó “Qué bueno es estar de nuevo en la Argentina”, en un español rudimentario, tras lo cual llegó “Out of Control”.
A continuación sonó el tema pedido por el público “Street Fighting Man”, que con 20.547 sufragios, votados en la cuenta oficial de Twitter, ganó en la preferencia de los fans sobre “Let It Bleed” (18.305), “Doom & Gloom” (14.354) y “Live With Me” (13.220). La banda se movió a gusto sobre una estructura de 56 metros de ancho y 25 de profundidad, que cuenta con una plataforma desplegable de unos 40 metros de largo.
Jagger mostró su carisma al contar que Charlie Watts había ido a comer choripán con chimichurri a la costanera, lo que generó risas y dudas sobre la certidumbre de esa información.
Entre las 19 canciones interpretadas en una noche inolvidable, casi no hubo diferencias en la lista que sonó días atrás en Santiago de Chile. “Tardamos tanto en llegar a La Plata que pensamos que íbamos a Montevideo”, dijo Jagger en tono de broma.
Uno de los hits de la última etapa stone “Anybody Seen My Baby” precedió a una de las baladas más emblemáticas de su set de clásicos: “Wild Horses”. Con el público en llamas, se sucedieron “Paint It Black”, el ritmo demoledor de Watts en su batería para la intro de “Honky Tonk Women”, mientras los trapos de recitales anteriores se agitaban, como el del último show en River, con la bandera argentina y la lengua de rigor, que lució en aquella impecable noche de 2006.
Los dos temas solistas de Richards, “Can’t be seen with you” y “Happy” fueron ovacionados, demostrando la empatía que tiene el guitarrista con el público argentino.
Luego llegó “Miss You”, tras lo cual Jagger bramó “son muy buenos cantantes”; tema que junto a “Gimme Shelter” y “Brown Sugar” conformaron un tándem potente, que llevó la energía bien arriba. Ya se anunciaba que llegaba el final, que arribaría con “Simpathy for the Devil” y la inoxidable “Jumping Jack Flash”.
Los bises vendrían con “You Can’t Always Get What You Want”, con un coro invitado conmovedor, y “Satisfaction”, cantado entre gritos y lágrimas de emoción.
Entre los famosos que estuvieron en la primera presentación de los Stones, sobresalieron el ex gobernador bonarense Daniel Scioli, Charly García, que había zapado ante Jagger en el Hotel Faena, y y el delantero de Boca Daniel Osvaldo, entre otros.
Esta es la segunda parada del tour que se inició el 3 de febrero pasado en Chile y que luego de los shows del 10 y 13 de febrero también en el estadio de la capital bonaerense, que seguirá por Uruguay, Brasil, Perú, Colombia y México.