“El maestro”, al maestro con no tanto cariño
“El maestro”, al maestro con no tanto cariño
Calificación: ***. Intérpretes: Diego Velázquez, Ezequiel Tronconi, Ana Katz, Valentín Mayor Borzone. Dirección: Cristina Tamagnini y Julián Dabien. Género: Drama. Emisión: Cine.ar Play.
Existen insultos de distintos tipos. Irónicos, groseros, vociferantes o silenciosos. Todos son agresivos. Pero existe uno de una sola palabra que denota un mundo, tanto el de quien lo recibe como de quien lo dice. Así ocurre en “El maestro”, la ópera prima de Cristina Tamagnini y Julián Dabien que eligieron una historia de pueblo chico para hablar de cómo los prejuicios, y los insultos, hablan más del emisor que del destinatario.
El protagonista es Natalio (Diego Velázquez), maestro en un pueblo de Salta. Natalio es un tipo tranquilo, amable y querido por todos, lleva una vida corriente fuera de la docencia: juega al paddle, trabaja, va al bar. El conflicto se presenta cuando llega al pueblo Juani (Ezequiel Tronconi), que huye de una situación no del todo clara y que le pide quedarse en su casa por un tiempo.
Un acto tan inocuo como caminar juntos para comprar algo o salir en bicicleta comienza a desestabilizar la calma habitual del pueblo, a generar miradas y rumores, y a trastocar lo que hasta ese momento había sido sólo tolerancia por algo que nunca se dijo en voz alta. Con algunos muy acertados y poco frecuentes recursos visuales, Tamagnini y Dabien van construyendo esa rebelión popular hecha de silencios y humillaciones. Velázquez construye su personaje en profundidad y lo acompaña Ana Katz en un muy buen desempeño. Algunas partes del relato que no terminan de desarrollarse no atentan contra el resultado general de este logrado trabajo que está disponible en la plataforma Cine.ar Play.
Por Rodolfo Bella
"Canela", cambiar para ser fiel al propio deseo
Calificación: ****. Intérpretes: Canela Grandi y familia. Dirección: Cecilia del Valle. Género: Documental. emisión: www.puentesdecine.com
Canela Grandi es una arquitecta trans, que vive en Rosario, tiene dos hijos varones, una hija en el exterior, una madre que cuidar y una nieta. Maneja su pick up Chevrolet naranja y su Dodge Coronado verde mientras escucha las noticias o canta un tema a viva voz, al tiempo que hace malabares para que los tacos altos no la compliquen al momento de frenar. Es que a Canela no le interesó apretar el freno cuando era Ayax, un tipo pintón que un buen día decidió convertise en mujer. Esa transformación, en pleno proceso del tratamiento hormonal, es la que focalizó la directora Cecilia del Valle. Pero lo hizo desde un lugar directo, emocional, sin golpes bajos, y aunque a veces apeló a un estilo casi didáctico para hablar de la identidad de género, logra impactar en el espectador a través de la frescura de Canela. El nudo de la trama, que es un documental que coquetea con la ficción, es la incertidumbre de Canela por operarse y cambiar su genitalidad. Esto sucede a diez años que Ayax mutó en Canela y cuando el almanaque canta 58 pirulos. Para eso dialogará con sus hijos, con su analista, con una amiga trans que es policía y hasta con Valeria, una ex pareja trans -de los tiempos en que era Ayax y lucía bigotes- y con quien comparte las mejores charlas de la película. La naturalidad de los diálogos con sus hijos, la aceptación a medias de su mamá y el error de nombrarse en masculino y femenino según los casos aportan una transparencia que realza el filme.
Por Pedro Squillaci
“Manual de supervivencia”, actuar contra viento y marea
Calificación: ***. Intérpretes: Esteban Bigliardi, Dolores Fonzi, Martín Piroyanski, Violeta Urtizberea y Julieta Zylberberg. Dirección: Victoria Galardi. Género: Comedia dramática. Emisión: Movistar Play.
Cumplir los deseos tiene un precio. Si ese deseo implica abandonar una profesión y un trabajo estable y redituable para comenzar de cero en otro y pasados los 40 años, las cosas se pueden complicar un poco. Así le ocurre al personaje protagónico de “Manual de supervivencia”, la serie de ocho episodios estrenada por Movistar Play. El personaje central está inspirado en una experiencia similar del protagonista, el exabogado y actual actor Esteban Bigliardi. En tono de comedia dramática, el trabajo relata el derrotero de Esteban -casi todos los personajes comparten el mismo nombre con sus intérpretes- por castings, oficinas de representantes, ensayos, berrinches de directores y decepciones variadas que incluyen a su padre y a su exnovia.
El relato está dividido en dos partes. Los primeros cuatro episodios presentan la historia del personaje y su accidentado inicio en la actuación. A partir del quinto episodio la trama adquiere mayor ritmo con la inclusión de escenas y personajes con sus propias conflictos. Es el caso de Martín (Martín Piroyansky), un director teatral exigente que produce un fracaso y reniega de los críticos y de los actores y que interrumpe una función para insultar a un espectador que se duerme y a otro que habla por teléfono. Un supuesto rodaje en Rosario también suma humor con las absurdas pretensiones de la estrella que protagoniza el filme, aunque lo que se subraya en la serie es la lenta pero firme actitud de Esteban que se obstina no en el éxito, sino en la satisfacción de hacer lo que quiere a pesar de todo.
Por Rodolfo Bella
“La isla de las mentiras”, secretos trágicos, más allá de la niebla
Calificación: **. Intérpretes: Nerea Barrros, Darío Grandinetti, Aitor Luna, Victoria Teijeiro, Ana Oca, Javier Tolosa. Dirección: Paula Cons. Género: Drama. Emisión: Cine.ar Play.
Lo peor siempre puede suceder, pero a veces ocurre un hecho que hace que, paradójicamente, todo empeore mucho más. Eso sucedió la madrugada del 2 de enero de 1921 en la isla española de Sálvora, cuando en medio de una niebla terrible se hunde un barco con 260 pasajeros que iban rumbo a Buenos Aires. Eso, que de por sí fue trágico, sumó otra tragedia, que fue la desaparición del guarda de la zona, que era el encargado de hacer las señas de luces para que el barco pueda visibilizar el lugar donde amarrar. María y Josefa asesinaron a ese guarda aprovechando que esa noche todos estaban distraídos celebrando la navidad. Parecía que todo cerraba con el barco hundido, ya que María y Josefa, junto con Cipriana, le salvaron la vida en una canoa a 48 personas y se convirtieron en heroínas del pueblo. Pero apareció León Cofré (Darío Grandineti), un periodista de un diario porteño que fue a cubrir el accidente y ratificó aquello de “pueblo chico, infierno grande”. La directora Paula Cons aprovechó al máximo la despojada escena isleña e hizo una notable reconstrucción de época sobre un caso real. Quizá le faltó adentrarse un poco más detalladamente en los personajes protagonistas para que la historia cale más hondo. Sólo el oficio de Grandinetti logra sacar adelante un filme que desaprovecha una historia que tenía todo para ser sobresaliente.
Pedro Squillaci