"Avengers: Infinity war", una guerra larga y ambiciosa
"Avengers: Infinity war", una guerra larga y ambiciosa
Calificación: ***. Intérpretes: Robert Downey Jr, Chris Hemsworth, Benedict Cumberbatch, Chris Evans y Mark Ruffalo. Dirección: Anthony y Joe Russo. Género: Aventuras. Salas: Monumental, Showcase, Village y Hoyts.
Después de la floja "Avengers: Era de Ultrón" (2015), Marvel puso toda la carne al asador con la ambiciosa (y por momentos desmesurada) "Avengers: Infinity War", una reunión cumbre de superhéroes en la que parece que todo vale y nada sobra. Ahí están Iron Man, Hulk, Thor, el Capitán América, Doctor Strange, el Hombre Araña, Pantera Negra y hasta el equipo de Guardianes de la Galaxia. Para semejante batallón hacía falta un villano a la altura, y la película lo encuentra en Thanos, otro malo que quiere destruir al mundo pero que esta vez explica sus motivos. Más allá de los excesivos 149 minutos de duración, hay que reconocer que los directores, los hermanos Anthony y Joe Russo, saben cómo mantener el ritmo, ajustando con precisión las secuencias de acción y los diálogos, y logrando que cada personaje tenga su momento, sin superponerse o amontonarse. También consiguen que los nuevos invitados (los Guardianes de la Galaxia) se integren al grupo con naturalidad, apelando al humor y a diálogos efectivos. Claro que, cuando se aproxima a su abierto final, a "Infinity War" se le empiezan a notar mucho las costuras de producto en serie, tan manipulado como manipulador, y la nobleza de sus héroes se evapora más rápido que el balde de pochoclo. Además es sólo la primera parte de una aventura que se resolverá el año que viene, cuando se estrene la cuarta película de Los Vengadores. Recién ahí esta historia se cierra, o al menos esa es la promesa.
Por Carolina Taffoni
"Las estrellas de cine nunca mueren", siempre es hoy
Calificación: ***. Intérpretes: Ele Jamie Bell, Annette Bening, Julie Walters, Vanessa Redgrave. Dirección: Paul McGuigan. Género: Drama. Salas: Monumental, Showcase y Village.
A veces la fama resulta cruel y desoladora, como lo que le sucedió a la estrella del Hollywood de los años 50, Gloria Grahame.
Y justamente este filme biográfico se encarga de retratar la vida de la diva después de la fama. Peter Turner vivió una historia de amor con la clamada actriz de "Cautivos del mal" (1952) más allá de diferencia de edad; mientras que Grahame pasaba los 40 años, él tenía 28.
Cuando la actriz se enferma y rechaza cualquier tipo de tratamiento, el joven decide llevarla a su casa de Liverpool para cuidarla. De este modo, este filme va tejiendo historias de amor y desamor, de alegría y frustración, de éxitos y fracasos, a través de flashbacks a tiempos pasados.
Ambientada en Liverpool en los años 70, esta historia resulta el cine contándose a sí mismo y develando la magia que hay detrás de las máscaras que desfilan en la pantalla grande, donde todo parece ser perfecto.
Lo interesante de este drama, que se asemeja al estilo de otras del género como "Mi semana con Marilyn", es que muestra el humanismo de una estrella, sus momentos de oscuridad y de dolor. En ese aspecto, la interpretación de Annette Benning es la clave para que ello se vea con tanta verosimilitud, logrando así calidez y ternura.
Luciana Boglioli
"Nada que perder", cine y propaganda
Calificación: **. Intérpretes: Petrônio Gontijo, Day Mesquita. Beth Goulart, André Gonçalves Barbosa. Dirección: Alexandre Avancini. Género: biográfica. Salas: Hoyts y Village