Se viene un superlunes en la televisión abierta argentina. Hoy se estrena en El Tres "Argentina, tierra de amor y venganza", una superproducción de época de Canal 13 y Pol-ka que se emitirá diariamente desde esta noche a las 22. Muchos actores relevantes respaldan este proyecto ambicioso, justo en un año declinante para el negocio de la TV abierta. Eugenia "la China" Suárez, Benjamín Vicuña, Gonzalo Heredia, Fernán Mirás, Andrea Frigerio y Virginia Innocenti son algunos de los nombres que sostendrán la nueva apuesta del Trece, que busca recuperar el liderazgo de audiencia que por ahora pierde ante su tradicional competidor, Telefe. Por su parte, Telefe saldrá a competir hoy en el prime time con la telenovela turca "Mi vida eres tú" (ver página 26).
La trama de "Argentina, tierra de amor y venganza" se remonta a las primeras décadas del siglo XX. Dos amigos, soldados sobrevivientes de la guerra civil española, en los años 30 del siglo pasado, escapan del infierno y consiguen hacer pie en la Argentina. Empiezan otra vida a salvo de la guerra, pero una vez en el país, la amistad se convertirá en traición.
Detrás de la historia personal de pura ficción, emerge tal vez lo más atractivo, una recreación libre de un tramo real de la historia social y política de los años 20 y 30: la prostitución organizada por la mítica Zwi Migdal, una red judío polaca que importó decenas de mujeres polacas para que ejerzan la prostitución en Buenos Aires, Rosario y otras ciudades de la Argentina. A gran escala, y bajo la vigilancia férrea de una maquinaria despiadada que inauguró, tal vez, la "trata de personas" o "blancas" como se decía en la época. Al cabo, un delito vigente cien años después, en la Argentina y el mundo del siglo XXI.
En exclusiva con Escenario, y en el set de filmación especialmente acondicionado en una antigua casona en la localidad de Don Torcuato, en la provincia de Buenos Aires, Eugenia "la China" Suárez puso en contexto: "Contamos una historia de hace casi un siglo, y en un punto la sociedad continúa con los mismos problemas". Sobre su personaje, confesó: "Me costó mucho componer mi personaje, Raquel, una mujer polaca. Fue un gran desafío. Hay mucha oscuridad, el clima del burdel, la forma de hablar, todo fue muy difícil, pero tuve el apoyo extraordinario de los compañeros que ayudan a sostener la experiencia. Después se verá como sale todo", dijo, y advirtió entre risas: "Estoy acostumbradísima a las críticas, es lo mío".
Para Eugenia, la serie no significa "un regreso mío a la televisión. En todo caso estuve más vinculada al cine porque tuve propuestas por ese lado, y por la maternidad que te quita tiempos", contó.
Su personaje, Raquel Liberman, existió. Fue la primera prostituta en desbaratar la red de trata de personas. Y todo ocurrió de manera fortuita. A ella un proxeneta le pone un local de antigüedades, le roban, va a denunciar y entonces ahí cae la red judía de proxenetas. "Es muy interesante porque la comunidad judía de la Argentina fue la única, en el aquel momento, en denunciar, literalmente escrachó, a sus propios miembros que estaban involucrados en el negocio de la prostitución. Hubo unos 400 implicados, la justicia actuó, pero finalmente los detenidos fueron un centenar", repasó la China, que comparte set con su pareja en la vida real, Benjamín Acuña, protagónico de la historia.
Con todo, la "institución" que creó y organizó el sistema, la Zwi Migdal, inscripta como "sociedad de ayudas mutuas" entre inmigrantes judíos polacos, terminó protegiendo a los involucrados, facilitó pasaportes falsos y con eso muchos consiguieron escapar del país. Todos los hechos fueron reflejados en los diarios de la Argentina, donde en 1930 se divulgaron fotos "escrachando" a los proxenetas. Las mujeres polacas eran traídas a la Argentina mediante engaños, provenían de ámbitos rurales, y luego en la práctica quedaban presas en los burdeles.
"Raquel Liberman es quien consigue salir parcialmente de esa mafia, y sus denuncias desataron el escándalo. Hay una frase que resume ese quiebre, esa potencia distinta que tuvo Raquel: «Yo no quiero esperar más a un hombre que venga a rescatarme, quiero salir por mí misma»", contó la actriz, que llevará en su cuerpo el interesantísimo personaje de Raquel. En el relato de los protagonistas hay un ida y vuelta permanente entre la ficción del siglo XX y la realidad del siglo XXI. "Lo más tremendo de esta historia es que todo esto continúa sucediendo ahora. Sigue la trata, los proxenetas, los cómplices, políticos, policías, médicos y los clientes, otro eslabón clave de la cadena", remató Eugenia Suárez.
Gonzalo Heredia, que personificará a Aldo Moretti, comentó a Escenario: "Venimos de una sociedad patriarcal, arraigada. Por eso tomamos conciencia de cuánto nos va costar desmembrar esa lógica. Estamos en una época sin guerras, aunque lo interesante de la serie es enfocar aquello que sucedía hace casi un siglo, lo negativo, y que hoy perdura como práctica social". Gonzalo agregó que "la idea de que seremos criticados es normal, es lo lógico. Me gusta estar del lado de los que hacen. Cuanto más crítica recibo, interpreto que más repercusión tiene lo que hago, por lo tanto, lo celebro", desafió.
Para Heredia, la devolución del público, los comentarios del tipo "me impactó tal o cual cosa", "son el combustible nuestro para seguir actuando, nos dan satisfacción y fuerza", aseguró.
Fernán Mirás, por su parte, tiene a cargo un personaje clave en el prostíbulo, Samuel Trauman, rufián típico de la época, despótico y mafioso, y responsable de la "importación" de chicas polacas mediante el engaño. El argumento falso para traerlas era la promesa de un "marido argentino". Con el personaje de la China Suárez en parte se enamora, se enternece, tal vez porque es la nueva, o porque es virgen.
La gerenta o madama del "Varsovia" será Andrea Frigerio. El "Varsovia" es el burdel más importante de Buenos Aires a finales de los años 20. Y ella es la ex esposa del inspirador del sitio, Samuel Trauman (Mirás). La madama es glamorosa ante los clientes, y luego una persona muy dañina, tal vez como consecuencia de todo lo que sufrió cuando era niña y joven.
"La prostitución hace un siglo estaba reglamentada, aunque no así el proxenetismo", explicó Frigerio. "Investigué el tema y es bastante impresionante ver las fichas que se conservan, los precios por cada actividad sexual, con brasero, sin brasero (por la calefacción en invierno). Por supuesto que estaba todo orquestado y tolerado por la moral de la época. Los hombres con prostitutas, y las esposas haciendo la vista gorda, y tomando el té entre amigas", sintetizó la actriz con un notable traje de época, el de su personaje, que aseguran desarrolló con maestría.
"Cuando hablamos de aquella maquinaria, en realidad también hablamos del presente. En los últimos 10 años se rescataron a más de trece mil mujeres de la trata. Todavía hay burdeles y esclavas dedicadas al comercio sexual", agregó Frigerio, quién actuará a Madame Ivonne, personaje que incluso es rescatado por la letra de un tango.