The End interpreta la esencia de “The Wall” y todos los amantes de Pink Floyd saben que es una nueva cita para que el muro se caiga a pedazos bloque por bloque, como reza el buen manual floydeano. En el marco del 40º aniversario del mítico álbum conceptual del grupo que revolucionó el rock sinfónico, la experimentada banda tributo de Buenos Aires liderada por Gorgui Moffatt llega hoy, a las 21, al teatro El Círculo (Laprida y Mendoza) en un show con un montaje escénico impactante. “«The Wall» es una obra conceptual genial, que mantiene una vigencia inédita”, dijo Moffatt.
La historia de The End se remonta a 1991, año en el que realizaron su primera presentación en vivo buscando transmitir el espíritu de Pink Floyd. Ese fue el comienzo de numerosos recitales y giras por Argentina entre los que se destacan shows en el Teatro Gran Rex donde realizaron 14 conciertos en toda su carrera, Luna Park y cientos de teatros tanto en la Argentina, como en Chile, Paraguay y Brasil.
Uno de los puntos más altos, tanto en convocatoria como en el aspecto artístico, estuvo en la presentación de “The Wall” en el Estadio Luna Park en noviembre de 2004, donde 6000 personas pudieron disfrutar de un espectáculo pocas veces visto: gran despliegue escenográfico con la construcción de una pared de 35 metros de largo por 7 metros de alto durante el show, efectos especiales, proyecciones gigantes, efectos de luces, pirotecnia, actores, orquesta y coro. El mismo show se repitió en el Luna Park en octubre de 2005, Rosario (2006), Teatro Coliseo (2007) y en Mendoza (2007 y 2008) con similares repercusiones.
En noviembre de 2009 The End realizó dos memorables conciertos también en el Gran Rex junto a Durga McBroom, vocalista original de Pink Floyd. La impresión favorable que la banda provocó en la cantante y la gran respuesta del público, llegaron rápidamente a oídos de Guy Pratt y Jon Carin, bajista y tecladista respectivamente de los Floyd originales. McBroom, Carin y Pratt, elevaron la apuesta y la categoría del show al cual se llamó “Pink Floyd Connection”. En 2011 como marco del 20º aniversario de The End se realizó el “Pink Floyd Connection II” junto a Durga McBroom y Guy Pratt en el Gran Rex y en varias ciudades de Brasil. Dentro del mismo marco de festejos la banda interpretó una serie de shows sinfónicos, agotando localidades en Rosario, Buenos Aires y Asunción de Paraguay.
Es así como, por más de 20 años, The End transmite lo mejor de Pink Floyd en vivo y en esta oportunidad, Rosario disfrutará de un show único realizado con un altísimo nivel escénico y musical. Moffatt, en diálogo con Escenario, contó cuáles son sus sensaciones en la previa del show de hoy en El Círculo.
—¿Cuándo y por qué se decidieron a ser una banda tributo a Pink Floyd?
—Hace muchos años, en 1990, nos juntamos un grupo de amigos para interpretar la música que más nos movilizaba que era la de Pink Floyd. Sin ningún tipo de pretensiones que fueran más allá de pasarla bien. Los dos primeros shows incluyeron canciones de otras bandas también como Genesis, Supertramp y The Police, fue así como pudimos completar un repertorio para un show en bares. Nos sorprendimos con el éxito que tuvimos en el comienzo y ahí fue cuando surgió la idea de abocarnos a definir un estilo y sonido. Eso lo podíamos hacer enfocándonos sólo en Pink Floyd. Así fue como en marzo de 1991 hicimos el primer show en San Isidro con total repertorio floydeano. En esos tiempos no había muchas bandas tributo, tal vez ese detalle ayudó a que tuviéramos un rápido crecimiento.
—¿Qué representa para ustedes “The Wall”, tanto el álbum como la película de Alan Parker? ¿Hay algo de esa conjunción en el show que proponen?
—“The Wall” es una obra conceptual genial, que mantiene una vigencia inédita. A nivel musical es increíble, distintos conceptos musicales que unen toda la obra, temas espectaculares, solos icónicos y un nivel de producción sonora que sólo Pink Floyd podía lograr. Como obra en general también es espectacular, tanto por los conceptos siempre vigentes y por supuesto todo lo que es el aspecto visual. No nos terminamos de sorprender con la vigencia de esta obra, no es casualidad que haya sido récord Guiness la gira de Roger Waters en nuestro país con 9 estadios de River llenos. Son cuarenta años de haber presentado una obra y aún sigue vigente. Nuestro show es una conjunción de la película y el disco, hay algunos detalles que diferencian uno de otro y nosotros tratamos de armar con lo mejor de cada uno según nuestro criterio.
—¿Qué tiene de especial este show para ustedes, que desearon volver a presentarlo en el 40º aniversario del álbum de Pink Floyd?
—Nos encanta interpretar “The Wall” y sentimos que este aniversario es una gran oportunidad para volver a hacerlo. Hace unos años era un poco complicado porque Waters había traído su gira a nuestro país. Mientras tanto, nosotros esperábamos el momento justo y este aniversario invita a recordarlo. Pero sobre todo disfrutar la vigencia de conceptos y sonidos que sigue teniendo.
—¿Con qué se va a encontrar la gente este jueves en el espectáculo?
—La idea es ofrecer un show distinto a lo que es un concierto de rock habitual. Adaptamos la idea original de Pink Floyd en la que la pared como algo corpóreo pasa a ser parte del show. Podrán ver y sentir un clima muy “The Wall”, con toda esa energía y sensación que hay en la película. Eso es lo que intentamos reflejar con este show.
—¿Piensan que con el público rosarino la dinámica o la energía del espectáculo será diferente, teniendo en cuenta que el fans club pertenece a nuestra ciudad?
—Creo que Pink Floyd le encaja a la perfección a Rosario. No hace falta que mencione toda la musicalidad que le ha dado Rosario a nuestro país. La sonoridad de los talentos rosarinos, y hasta su poesía, puede encontrar una cercanía con la obra de Pink Floyd y Roger Waters en particular. Una música con muchos matices y sensibilidad. A nosotros en particular nos encanta Rosario, tenemos muchos amigos, nos ha ido muy bien. Me animaría a decir que después de Buenos Aires, la ciudad donde más tocamos es Rosario.