La recesión en Estados Unidos supuso un revulsivo para las comedias cinematográficas, un género que triunfa en época de crisis cuando la audiencia busca en la gran pantalla la sonrisa que les niega la rutina.
La recesión en Estados Unidos supuso un revulsivo para las comedias cinematográficas, un género que triunfa en época de crisis cuando la audiencia busca en la gran pantalla la sonrisa que les niega la rutina.
Así, en lo que va del año, un 20 por ciento de los ingresos acumulados por las 50 películas más taquilleras en Estados Unidos correspondió a filmes con sentido del humor protagonizados por estrellas como Steve Carell, Ben Stiller, Adam Sandler o el cada vez más popular Seth Rogen.
Una tendencia al alza refrendada por títulos como "Navidad sin los suegros", que lideró la taquilla estadounidense durante los dos últimos fines de semana, o "Una chihuahua de Beverly Hills", que hizo lo propio en octubre.
El estreno de "Bedtime Stories", con Adam Sandler, y la esperada película de Jim Carrey, "Yes Man", volverán a llevar a miles de espectadores al cine para olvidarse de sus problemas. Títulos a los que se sumará "Nothing Like the Holidays" antes del cambio de año y en enero "Bride Wars" con la nominada a un Globo de Oro, Anne Hathaway.
Durante la Gran Depresión, tras la crisis de 1929, se produjo el florecimiento de la industria de Hollywood de la mano, entre otros, de ilustres comediantes como Stan Laurel y Oliver Hardy (El gordo y el flaco) o los Hermanos Marx.
Hoy en día, la diversión que proporcionaron clásicos como "Una noche en la ópera" (1933) ha sido sustituido por películas como "Superagente 86" o "Una guerra de película", que si bien no conquistarán el corazón de los puristas del cine, han arrasado en términos de popularidad.
Esas dos producciones, junto con "Step Brothers" y "No te metas con Zohan" han superado los 100 millones de dólares en venta de entradas desde que aparecieron en cartelera hace unos meses. En 2008, 15 comedias se han colado ya entre el medio cen tenar de películas más vistas del año en Estados Unidos, por las diez que entraron en esa clasificación en 2007.
La taquilla en general parece estar sufriendo poco los efectos de la crisis económica y va camino de superar los 9.600 millones de dólares recaudados el año anterior gracias, en gran parte a cintas de superhéroes como "Batman, el caballero de la noche", "Iron Man" e "Indiana Jones y el reino de la calavera de cristal".
Los tres filmes juntos suman ya más de 1.100 millones de dólares en venta de entradas en el mercado norteamericano.
Desde el pasado mes de septiembre, en plena vorágine de planes de rescate para instituciones financieras, los ingresos de los cines no han dejado de subir y siempre una comedia se situó entre los cinco largometrajes más vistos.
Tanto es así que los últimos diez fines de semana mejoraron los resultados de las taquillas cosechadas durante el mismo período de 2007, año en el que se obtuvo la mayor recaudación de la historia en en la cinematografía de Estados Unidos.