"Cada personaje de ‘Hacer la vida' nació de algún evento real y sus particularidades de imaginar que el vecino que saludo todos los días y no me mira, o la mujer que pasea su enorme perro dogo sin correa por la plaza llena de pibes, tienen algo adentro que les quema", dijo Alejandra Marino, directora de "Fanzie", con Mimi Ardú y "El sexo de las madres", donde también trabajó con Victoria Carreras en el protagónico. Al continuar con las situaciones que la motivaron para llevar adelante este filme, citó que: "Una vez encontré a una chica llorando sentada en mi umbral, súper abrigada en pleno verano porteño, y cuando me acerqué a preguntarle si podía ayudarla me dijo ‘gracias por no ser indiferente', se levantó con mucha dificultad y se alejó. En fin, me gustó imaginarme historias que se entreveran y se resuelven como les sale, por impulso del deseo. Como la vida, me parece", finalizó quien también fue directora de la obra teatral "Piel marcada", de Lucía Steimberg.