En una rara incursión el cine argentino apela a lo fantástico. El resultado se podrá ver a partir mañana cuando se estrene la película “Fase 7”, protagonizada por Daniel Hendler, sobre los vecinos de un edificio que deben permanecer aislados debido a una grave enfermedad, una situación límite que pone al descubierto lo mejor y lo peor de los vecinos. Hendler adelantó que la película del director Nicolás Goldbart, en la que comparte el elenco con Federico Luppi, Yayo y Jazmín Stuart, es una “comedia fantástica con mucha acción y delirio”, un género poco explorado en Argentina.
—¿Cuál es el origen de la película?
—El director estaba escribiendo otro proyecto,“Visitor”, bastante más grande y difícil. Mientras eso se iba atrasando le surgió la idea de hacer este otro que en principio parecía más chico porque se desarrollaba sólo en un edificio. Pero creció y se convirtió en una comedia fantástica, potente con mucha acción y delirio.
—¿Cómo te sentís en este género cuando en general estás más vinculado al drama?
—Este tiene unos climas de película más de género, pero me siento cómodo cuando el director sabe hacia dónde está yendo. En ese caso, sea el género que sea me voy a sentir cómodo.
—¿No siempre se trabaja de esa forma el cine argentino?
—En general tuve experiencias muy buenas en ese sentido porque mi puntería está un poco focalizada en trabajar con gente que me guste y con la que me sienta cómoda. La química en el trabajo es un gran potencial. Rara vez elijo los proyectos por conveniencia, o especulo qué personaje me conviene hacer o con qué tipo de director trabajar.
—¿Con esa misma actitud elegís los trabajos en televisión, como los que hiciste en “Para vestir santos” o “Aquí no hay quien viva”?
—Si hay un proyecto en el que pienso que no la voy a pasar bien no lo hago. No porque considere que el trabajo es pasarla bien, sino que cuando se pasa mal puede ser un infierno. En esas tiras me sentí cómodo con la gente y los acepté con esa ilusión.
—¿Por qué no estás más seguido en televisión?
—Depende de qué tipo de propuesta sea. En lo que hice la pasé muy bien. Pero trabajar en la tele implica tener un horario, un plan durante unos meses y saber que vas a tener un trabajo. Pero también es un poco más desquiciante. Es apasionante, pero a la vez difícil.
—¿La televisión garantiza la fama?
—No sé. En realidad en Montevideo me sentía más actor de teatro y acá se me conoció más por el cine y la publicidad y no me tomaron muy en serio para el teatro. Eso no tiene mucho que ver con lo que uno siente, pero sí con las oportunidades.
—¿Cómo fue el trabajo con Luppi y el resto del elenco?
—Me encantó. Cuando me pienso actor de veterano, me cuesta y no estoy seguro si lo seré algún día. Pero ver a Luppi es importante porque está ahí con toda su sabiduría, que ver con la generosidad, la predisposición y el buen humor. De golpe él estaba rodeado de una manada de insolentes que apenas tienen un puñado de películas encima y se comportó como uno más y pedía que se lo dirigiera. Quería trabajar y ver eso da ilusión.
—“Fase 7” se diferencia de las películas que se filman en Argentina, que en general son más introspectivas. Además la comedia fantástica no es un género frecuente...
—Eso tiene que ver con el tipo de cinefilia que tiene Goldbart, muy amante de John Carpenter. Es verdad que no se hacen muchas películas de género y este es una obra de género, con un humor muy personal. Creo que esta película tiene un tipo de rareza que no creo que vaya a alejar al público.
—¿En qué consiste esa rareza?
—Si te fijás en el elenco ya existe algo de esa rareza en la convivencia entre Federico Luppi, Yayo, Jazmín Stuart y yo. Federico Luppi y Yayo en un mismo elenco habla que hay algo corrido de lugar, un poco impredecible. Y creo que ese es el tono de la película.
Recorrido
Protagonistas. El director Nicolás Goldbart reunió un elenco ecléctico que incluye a Federico Luppi, Yayo Guridi, que saltó a la fama a partir de “ShowMatch”, además de Jazmín Stuart, quienes comparten el elenco con Daniel Hendler.
Opera prima. Nicolás Goldbart estrena con “Fase 7” su ópera prima. El novel director tiene una extensa carrera en cine como editor de los filmes de Pablo Trapero, además de haber trabajado en el mismo rol para Rodrigo Moreno, en “El custodio”
Premio. El actor Daniel Hendler ganó en 2004 el Oso de Plata a mejor actor protagónico en el Festival de Cine de Berlín en 2004 por su personaje en “El abrazo partido”, de Daniel Burman, quien recibió el Gran Premio del Jurado.
Proyectos. El próximo proyecto en cine de Hendler es el filme “Mi primer casamiento”, de Ariel Winograd, donde compartirá el elenco con Natalia Oreiro e Imanol Arias. Winograd ya rodó “Cara de queso. Mi primer gueto” en 2006.