No es fácil el amor y mucho menos cuando decide partir, cortar por lo sano o dar vueltas para después volver. En tono de comedia, pero también a modo de reflexión se presenta "Amor mío que me dejaste tantas veces en mi vida", un texto de Lauro Campos con la interpretación de Christian Valci, Nives Paschetto, Marita Vitta y Paula Solari, una obra en tres actos que toma al amor por las astas e intenta retratarlo en algunas de sus facetas. Reacondicionada para las calurosas noches de verano, el estreno es hoy, a las 21.30, en la sala Nicasio Oroño (San Lorenzo 1055). Podrá verse todos los sábados de febrero y marzo.
"Esta pieza fue escrita para el Negro Valci específicamente y está estructurada en tres pequeñas historias que de alguna manera hablan del amor en sus distintos perfiles. La pieza es muy simple y a la vez está escrita en el estilo de la comedia norteamericana. Se trata de tres historias en las que el amor se va por distintas razones", explicó el autor de la obra, Lauro Campos, actor, guionista, director teatral, docente y una destacada figura del teatro rosarino que lleva más de 50 años de trayectoria y que el año pasado fue declarado Artista Distinguido por el Concejo Municipal de Rosario.
En el primer acto, llamado "El casting", dos actores no muy brillantes se encuentran en una selección de casting y entablan una relación, cada uno con sus dificultades actorales y no habiendo triunfado en el teatro, pero siempre queriendo que el teatro los quiera. "Es una historia que a mí siempre me da vueltas, pienso en cuándo me va a dejar el teatro a mí, porque en realidad yo digo que ésta es mi última obra o la última vez que dirijo, pero nunca lo puedo dejar. La verdad es que el teatro es el que te deja, cuando la gente deja de ir a verte, cuando no interesás más como actor o cuando sos un director que se repite. Sabemos que todo este temor da vueltas siempre de una manera casi obsesiva en la gente del teatro, aunque no lo confiese", dijo Campos. En esta primera escena Christian Valci tropieza con la actriz Marita Vitta, en una historia para reír y emocionarse, donde estos dos personajes fueron varias veces abandonados por el teatro como profesión.
El segundo acto es "El turno", donde dos pacientes se encuentran en una sala de espera del psicólogo y donde el amor es lo inalcanzable por la naturaleza y conducta de los personajes. El amor huye despavorido por el carácter del otro en una escena de humor desopilante para reflexionar. "Es muy gracioso ver cómo un ansioso termina poniéndole límites a un toc. Es tal vez la parte más intelectual de la obra, porque los que sepan más de terapia se van a divertir más que los que no sepan, pero se entiende igual que es un amor que deja por los malos modos del otro, por el mal carácter del otro", contó Campos. En esta parte, Valci se cruza con la actriz Nives Paschetto, en dos roles destinados a la sesión terapéutica.
Finalmente, el tercer acto es "La sentencia", donde el amor abandona haciendo daño. Se trata de una historia tragicómica en la que el abandono termina con el triunfo de la feminidad. "El cuadro final es el amor que deja aún sabiendo que hace daño al otro, pero lo deja porque no tiene más remedio. En esta historia al amor le llega el punto final, la sentencia de separación como modo sanador", dijo Campos. Hacia el final Christian Valci comparte escenario con Paula Solari, actriz que tiene un recorrido en el stand up.
Valci es la pieza clave de "Amor mío que me dejaste tantas veces en mi vida", no sólo porque co-dirige la obra junto con Campos, sino porque interpreta tres roles bien distintos entre sí y para esto tuvo que ensayar arduamente, además de trabajar con tres reconocidas actrices y generar buena química con cada una de ellas.
Identificación
Según Valci, los tres actos podrían estar basados en situaciones reales, de gente que necesita afecto y de los que no pueden resolver situaciones emocionales, por lo que cualquiera puede sentirse identificado con la historia. "En la primera parte la actriz dice que la salvó el teatro, que ella ama hacer teatro aunque sea una loser, y espera que se vuelva a encender el fuego sagrado y que el teatro vuelva a su vida, donde cree que alguna vez triunfará", contó el protagonista, que para este primer acto dijo haberse inspirado en muchos actores que vio y conoció a la largo de su carrera, aquellos que dan vueltas por las escuelas de teatro y las salas independientes, pensando que alguna vez podrán lograr un éxito en los escenarios.
"Para interpretar al segundo personaje me inspiré en toda esa gente a la que los psicólogos mandan a clases de teatro, aquellos que están como nerviosos o ansiosos y me basé en ellos, y en su timidez también; están con las manos, los ojos y los pies en constante movimiento. Estudié cada detalle, trabajo mucho con el espejo primero y después la comunicación con las actrices, aparte que las tres vienen de escuelas diferentes y tuve que lograr que con cada una funcione", contó el intérprete que también es director y docente de teatro.
Para la tercera parte, "La sentencia", Valci detalló que no se siente cómodo haciendo del típico chanta, un poco machista, que hace de las suyas y después espera que le sigan abriendo las puertas de su casa. "El tipo no puede entender cómo la mujer le presentó una demanda, es un tipo sincero porque no oculta la infidelidad, pero espera que lo perdonen una y otra vez y no resulta así; en esta historia la mujer es la heroína, que logra sanar su amor".
El elenco seguirá en escena todos los sábados en la sala Nicasio Oroño, que este año debuta con una temporada de verano. Según el actor, este verano en Rosario tiene muchas obras independientes, con gente que apuesta al teatro en cualquier momento del año. "Hay propuestas donde se llena y el público acompaña, se ve muchísima gente y esto es alentador. Veo que la gente está volviendo al teatro, y hay que tratar de dar todo lo posible para que el público vuelva", completó.