La diputada provincial Alicia Gutiérrez presentó un proyecto de ley que en defensa de la cuenca del arroyo Monje, declarando área protegida desde el origen del curso de agua hasta su desembocadura en el río Coronda. "El objetivo es preservar la flora y la fauna y el paisaje natural de la intervención del hombre", indicó la legisladora autora de la iniciativa que establece a la cuenca del Monje como reserva hídrica natural.
Esta es la segunda vez que Gutiérrez presenta esta iniciativa que establece como área natural protegida toda la cuenca del arroyo Monje, desde el origen de dicho arroyo hasta su desembocadura en el río Coronda, y lo inscribe bajo la categoría de Reserva Hídrica Natural. Esta normativa, que en 2015 obtuvo media sanción de la Cámara baja pero luego perdió estado parlamentario, tiene por objeto preservar la flora y la fauna autóctonas y el paisaje natural cuya fisonomía y características han sido modificadas de manera notable por la intervención del hombre, poniendo en riesgo la biodiversidad y riqueza natural y la belleza propia del lugar.
"Su existencia reporta múltiples beneficios para el ecosistema, en general, y para el sistema hidrológico, en particular, ya que regula el caudal de agua, atenúa las inundaciones y contribuye a la recarga de acuíferos", explicó la legisladora.
Añadió que "los humedales de las lagunas permanentes o temporales retienen y diluyen contaminantes producidos por los agroquímicos utilizados en las prácticas agrícolas de la zona", mientras que "los bosques ribereños procesan smog, producen madera, leña, forraje, materiales para la construcción, alimentos vegetales y animales, brindan componentes para la elaboración de medicamentos y benefician la polinización de las huertas y el arbolado público".
Gutiérrez también advirtió sobre "las frecuentes propuestas de canalización que buscan aumentar la capacidad de conducción del canal existente a los efectos de agilizar la salida de los excedentes hídricos provenientes de la red de drenaje de la cuenca de aporte de la Cañada Carrizales". A la vez, pretenden disminuir los efectos del almacenamiento determinados por la morfología de la zona y minimizar los desbordes y los tiempos de permanencia del agua.
"Muchos productores reclaman esta obra como una solución al tema de las inundaciones y los anegamientos. Sin embargo, según lo planteado por los proteccionistas y los especialistas en el tema, solo agrava el problema porque modifica el ambiente natural, provocando la extinción del paisaje y la biodiversidad y no permite que los humedales cumplan con su función vital de regular las inundaciones. Esa modificación de caudal y velocidad del curso de agua, que erosiona las costas aguas abajo, provoca impactos negativos en las reservas de agua río arriba", explicó.
Entre los fundamentos del proyecto, se menciona que la cuenca del arroyo Monje también constituye un gran atractivo turístico para la zona "ya que convoca a muchas personas amantes de la pesca, que disfrutan del contacto con la naturaleza y la vida al aire libre". A lo largo del arroyo la formación de saltos naturales posibilita la presencia de peces, en especial de dorados, que son muy solicitados por los pescadores. Y, además, en la desembocadura, se forma una playa natural conocida como Balneario La Boca de Monje que es el lugar elegido por los visitantes y turistas de la región. "Por lo tanto, es necesario tomar medidas para proteger su belleza y paisaje, fomentando el respeto al medioambiente y evitando la pesca indiscriminada", afirmó la diputada del Partido SI, integrante del Frente Progresista.