Minutos antes del mediodía de ayer, una fuerte explosión sorprendió a los vecinos de San José del Rincón y a gran parte de Colastiné Norte, localidad ubicada a 13 kilómetros de la capital provincial. Por motivos que se investigan un depósito de garrafas –ubicado a 100 metros al oeste de la Ruta Provincial Nº 1, a la altura del kilómetro 7,8– que no contaba con habilitación, voló por los aires en una sucesión de estruendos que produjo la destrucción total del lugar y que dejó a un joven herido, quien se encuentra internado en terapia intensiva del hospital José María Cullen.
Ayer fuertes explosiones rompieron con la tranquilidad que caracteriza a la ciudad de San José del Rincón y a todos sus alrededores. Los automovilistas que transitaban por el kilómetro 7,5 de la Ruta 1 y los vecinos del depósito denunciaron las explosiones al 911.
Inmediatamente patrulleros de la Comisaría 14ª de San José del Rincón y del Comando de la Costa, arribaron al lugar y socorrieron a los operarios de la firma en el predio adonde funcionaba la venta de garrafas que está ubicado a unos 100 metros hacia la laguna Setúbal. Uno de ellos, un joven de 20 años que fue identificado como Ricardo Vecchio, resultó con heridas como consecuencia de la explosión. La víctima fue trasladada en primera instancia al Samco rinconero.
Desde la jefatura de la UR I La Capital, enviaron dos autobombas desde la ciudad de Santa Fe, y camionetas con agentes de la agrupación Cuerpos para la realización del corte preventivo total de la Ruta Provincial Nº 1, con la intención de prevenir daños si continuaban las explosiones de las garrafas.
El intendente de la ciudad de San José del Rincón, Carlos Sánchez, en diálogo con Diario UNO de Santa Fe, expresó que “la distribuidora de gas no estaba habilitada por la Municipalidad de San José del Rincón, para el funcionamiento comercial en el expendio de garrafas de gas envasado al público”, y aseguró que “las instalaciones y el predio no se ajustan a la normativa vigente exigible para la manipulación de gas en garrafas”.
El depósito en el que se guardaban las garrafas resultó completamente destruido, y los bomberos trabajaron para terminar primero con el fuego, y después para tumbar las paredes recalentadas por el incendio y completamente resentidas por las sucesivas explosiones.
Los bomberos realizaron peritajes y la causa del incendio pudo ser por el choque de dos garrafas, o por un desperfecto eléctrico o porque alguien encendió un cigarrillo. El dueño del local no quedó detenido y la causa es llevada adelante por el fiscal Omar de Pedro. El joven trabajador herido seguía delicado en la unidad de terapia intensiva del Hospital Cullen de Santa Fe.
Sin habilitación. El secretario de Control del municipio de Rincón, Mario Ocampo, confirmó que el lugar que funcionaba como depósito y venta de gas envasado no contaba con la habilitación municipal. “A este lugar lo tenemos registrado pero no tenía concluida la habilitación porque no cumplía con ciertos requisitos de las ordenanzas municipales”, dijo.
Esas condiciones que exige la Municipalidad para habilitar ese tipo de negocios tienen que ver con que los locales se ajusten a la ordenanza de zonificación –que establece, de acuerdo al tipo de actividad, el lugar donde se pueden establecer–, y en segundo orden que cumplan con las disposiciones de la autoridad de aplicación, que en este caso es la Secretaría de Energía de la Nación.
Según Ocampo, la distribuidora Jorge Gas, “en principio, no cumplía ni con los requisitos de zonificación ni con las normas nacionales”. Por esos motivos el municipio de Rincón no lo habilitaba y por estar en funcionamiento se le labraron una serie de notificaciones, intimaciones y sanciones que se tradujeron en multas. Al ser consultado acerca de cuántas veces fue multado ese comercio, el funcionario dijo no recordar la información precisa pero aseguró que el expediente ya había llegado “a manos de la jueza de faltas para continuar con los trámites que correspondían y que en última instancia siempre terminan en una clausura”.
“Nosotros no tenemos las herramientas como para hacer una clausura preventiva inmediata cuando detectamos una falta reiterada que puede poner en peligro la seguridad de las personas y de las cosas como sucedió en este caso”, dijo.
“En última instancia –continuó– tenemos la herramienta. Lo que no podemos hacer es una medida preventiva inmediata. Sí lo podemos hacer cuando detectamos faltas continuadas que se desobedecen y que ponen en riesgo muchas cosas como la seguridad pública”.
(Fuente Diario UNO de Santa Fe)