Cuándo a los jóvenes y adolescentes que concurren a los clubes y entidades deportivas se los consulta sobre salud mental, hablan y le ponen nombre y apellido a sus propios padecimientos: consumos problemáticos, suicidios, ataques de pánico, ansiedad y depresiones (a veces por exceso de presión), cuestiones de género y violencias.
Con ese ese escenario como diagnóstico previo y entendiendo a los clubes como "espacios privilegiados para hablar con esta población, que es la más vulnerada y la más vulnerable", tal cual lo señala la directora de Salud Mental de la provincia, Celina Pochettino, Rosario es ya desde el final de 2022 la ciudad elegida para la puesta en marcha de un programa que se propone no solo trabajar con los jóvenes en estas temáticas y hablar de su salud mental, sino además capacitar a quienes trabajan con ellos en esos espacios.
"Se trata justamente de avanzar en el modelo de salud comunitaria, dando cuenta que cualquiera puede cuidar los vínculos afectivos. Es necesario reforzarlos y desestigmatizar los padecimientos de la salud mental, porque nadie está exento de transitarlos y porque hay que sumar actores, ahora en este caso, los clubes", explicó a La Capital la directora de Salud Mental de la provincia.
Junto a Unicef, el Observatorio Social y Económico de Clubes de barrios y afines, en alianza con la Federación Santafesina de Clubes y la Asociación Rosarina de Entidades Deportivas Amateurs (Areda) y el Ministerio de Salud de la Nación, la Dirección de Salud Mental puso en marcha el programa en Rosario ya en noviembre con la presentación de un primer diagnóstico con la presencia de unas 50 entidades locales .
La generación de herramientas
Uno de los puntos más "interesantes" de la propuesta, según indicó Pochettino, "es el objetivo de trabajar en la generación de herramientas de promoción y acompañamiento a los jóvenes desde la perspectiva de la salud mental comunitaria, por lo que viene a subrayar ese modelo de cuidados que busca trascender el modelo sanitario".
Para la funcionaria santafesina, se trata de "multiplicar las acciones de cuidado y sumar a todos los actores posibles", en este caso a los clubes de barrio y organizaciones de los territorios, "para armar la trama de los cuidados en salud mental".
En lo específico, se trata de dar herramientas concretas a los adultos que trabajan con jóvenes y adolescentes en esos espacios e incluso de trabajar en la articulación con equipos de salud cuando aparecen padecimientos que lo requieren.
"Fundamentalmente se trata de aprovechar los clubes, que son espacios privilegiados para escuchar y trabajar con los adolescentes, pero además generar herramientas en estos espacios que los empoderen en los cuidados, porque hay que saber que cualquiera puede cuidar, nadie sobra en este escenario y nadie está exento de tener padecimientos a lo largo de su vida", señaló Pochettino.
El germen
El primer relevamiento nacional de clubes de barrio realizado entre el Observatorio Social y Económico de Clubes y la Universidad Nacional de Avellaneda, que arrojó la existencia de más de 8 mil entidades a lo largo y ancho del país, así como el análisis de sus fortalezas y debilidades, fue en parte el germen del programa que desembarca en Rosario.
"Allí pudimos notar que una de las máximas preocupaciones en los clubes eran cuestiones vinculadas a la salud mental, desde el inicio en adicciones, ataques de pánico y ansiedad, depresiones derivadas de la presión que sufren muchos jóvenes por tener éxitos deportivos o situaciones de bullyng", detalló Cristian Font, titular del observatorio.
En ese contexto y en el trabajo conjunto con Unicef, Rosario fue la elegida para dar los primeros pasos hacia la generación de herramientas que den respuesta a esas preocupaciones. No solo, como señala Font, por tratarse de una ciudad con una gran cantidad de instituciones en su territorio y de diversas características, sino además porque "es una ciudad compleja que requiere respuestas complejas", señaló la directora de Salud Mental.
Para el responsable del observatorio, que adelantó que a partir de marzo se conocerá un diagnóstico con mayor profundidad, ya el relevamiento nacional de las entidades deportivas "permitió poder identificar que es urgente y necesario empezar a hablar de salud mental, pero además mostró el déficit que tienen las instituciones para poder dar respuestas una vez detectados los casos".
"Ahora es crucial empezar a construir un entramado, clubes, Estado, profesionales de la salud y todo organismo o entidad pertinente que nos permita no solo detectar las problemáticas como lo venimos haciendo, sino que además podamos empezar a construir soluciones para quienes las padecen", señaló sobre el programa que tendrá su inicio en Rosario, pero que piensa en multiplicarse en diferentes ciudades del país.