Un gran escritor olvidado

Se suele decir que Fausto Hernández fue uno de los grandes escritores de Rosario. Sin embargo, sus libros, publicados hace más de cincuenta años, en general no fueron reeditados y su obra periodística no ha sido recopilada. Nacido en Rosario en 1897, escribió dos libros sobre la ciudad: Biografía de Rosario (1940) y El mito de Francisco de Godoy (1958). Como poeta, sus libros más importantes fueron Pampa (1938) y Río (1943). Otros libros suyos son Hacia afuera (poesía, 1926), Picoverde (poema escénico para niños, 1952) y El inventor del saludo (drama, 1955). Desempeñó diversos oficios: tocó el piano en cines de Rosario, cuando las películas eran mudas, y desarrolló una extensa carrera como periodista, en cuyo transcurso trabajó en La Capital y La Tribuna. También fue profesor en la Escuela de Artes Visuales. Falleció en 1959, dejando inédito un libro de poemas, Ensueño, con ilustraciones de Julio Vanzo.

  Elías Díaz Molano, que escribió con él una obra de teatro, Yacú-Toro, lo evocó como un poeta solitario. "Dudo que alguien haya penetrado alguna vez el más pequeño ángulo de su intimidad, que él guardaba celosamente", dijo. En una nota publicada en 1980, el diario La Tribuna afirmó: "Muerto Fausto Hernández, sus papeles, que eran muchos, se perdieron, al parecer sin remedio". Entre los pocos que se preocuparon por estudiar su obra, Arturo Fruttero escribió sobre Pampa y Raúl Gardelli lo evocó en diversos artículos.