Se lanza un fuerte operativo para prevenir accidentes en la ruta 33

Las localidades que componen el corredor vial de la ruta nacional Nº 33 serán testigos y partícipes a partir de hoy de una iniciativa que busca poner un freno al problema del alcohol al volante y reducir el alto porcentaje de conductas riesgosas que se suceden en todo el tramo, sobre todo entre conductores jóvenes. El operativo de fiscalización, que comenzará esta noche y se prolongará la madrugada de mañana, incluirá una intensa acción de divulgación de información en las localidades de Pérez, Zavalla, Pujato, Casilda, Sanford, Chabás, Villada y Firmat.

La coordinación está a cargo de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, que diagramó un operativo de control, mientras que en la difusión participarán más de 50 personas, entre autoridades comunales y provinciales, representantes de fuerzas de seguridad, padres, vecinos, voluntarios y entidades vinculadas con la temática vial.

Esta intervención responde a una fuerte movida que comenzó en Pujato el mes pasado, con un petitorio y una serie de reuniones. El móvil fue una seguidilla de accidentes y situaciones riesgosas protagonizadas por los jóvenes a la entrada y salida de los bares y boliches. Padres y vecinos pidieron entonces medidas concretas. Allí coincidieron con el planteo de los funcionarios en la necesidad de una política eficaz, a la que deben sumarse todos los sectores sociales (ver aparte).

Hincapié en el consumo. En este sentido, la Agencia de Seguridad Vial coordinó con fuerzas de seguridad y funcionarios comunales y municipales un fuerte operativo de control que, si bien será integral, hará hincapié en el consumo de alcohol por parte de los conductores, por lo que se buscará detectar y sancionar esta conducta. En la acción participarán efectivos policiales, gendarmes e inspectores de tránsito. Además, está previsto el uso de 10 vehículos de la Policía, Gendarmería con su división de delitos especiales, personal de las comunas y cinco aparatos de medición de alcoholemia.

Gustavo Franco, director de Seguridad Vial, manifestó que "inicialmente los boliches bailables de la zona movilizan unas 6 mil personas y abren sólo los sábados. La particularidad es que finalizan las fiestas cerca de las 7 u 8 de la mañana, y se mezcla el tráfico de los usuarios del corredor con el del tránsito pesado. Nada menos que un promedio de 8 mil camiones por día que se dirigen a los puertos cargados con cereal".

De las reuniones que mantuvieron funcionarios provinciales y municipales, Franco obtuvo una estadística tenebrosa: "Los responsables del corredor nos comentaron que se registran casi seis accidentes por fin de semana".

Además, adelantó que "si se detectan casos de alcoholemia los autos serán remitidos al corralón municipal de las ciudades participantes y el juez de faltas labrará las actas y las multas correspondientes".

Caravana. Por otra parte, el control será acompañado con una caravana integrada por personal de la Seguridad Vial, vecinos, voluntarios y miembros del grupo Prohibido Olvidar, de Casilda, integrado por padres de víctimas fatales de choques. A bordo de un minibús el grupo recorrerá, desde las 23 del sábado y hasta las 4 del domingo, los bares, minimarkets, "snacks" y estaciones de servicio de todas las localidades del tramo entregando volantes con información preventiva sobre el tema.

El objetivo en este caso es llegar a los jóvenes durante "la previa" al boliche bailable, cuando consumen alcohol antes de ingresar. También se harán alcohotest voluntarios a todos aquellos que deseen conocer el funcionamiento del aparato y la dinámica de los operativos.

La concientización también será para adultos, de modo ejemplificador, y la folletería también será entregada en aquellos sitios destinados a un público mayor, como los restaurantes.

Desde la Agencia de Seguridad Vial ponen énfasis en la necesidad de tomar conciencia de que el alcohol y la conducción deben ir por caminos separados y concientizar sobre las consecuencias de conducir bajo sus efectos. "Es importante reconocer que esta sustancia en el cuerpo disminuye las facultades. Por eso no se debe ingerir antes de tomar el volante y en este caso las alternativas son ceder la conducción a un conductor designado o bien recurrir a otro medio de transporte. También se debe evitar por todos los medios subir al vehículo de un conductor que ha bebido y disuadir al resto del grupo de hacerlo", recomendaron desde el organismo provincial.

En Santa Fe

El Concejo Municipal de Santa Fe aprobó una ordenanza que reduce a 0,3 gramos por litro de sangre el nivel de alcohol permitido para los conductores de motovehículos, y nulo para los conductores de vehículos del transporte público, ya sea de carga o pasajeros. La iniciativa partió de la "preocupación en el orden local provincial y nacional, por disminuir los perversos efectos del alcohol en relación a los reflejos del organismo humano".