Condenan a cirujano por mala praxis a una paciente cuyos senos quedaron desparejos
La Cámara Civil condenó a un médico a indemnizar en casi 30 mil pesos a una paciente a la que operó
dos veces para realizarle implantes en los senos porque, en ambas oportunidades, los pechos
quedaron desparejos. Los peritos constataron que “los senos presentan diferente forma,
tamaño, altura y ubicación con respecto a la línea media. En cuanto al ángulo, orientación y
simetría de los pezones, el complejo derecho es simétrico, el izquierdo se encuentra aplastado en
su porción inferior, pezón apuntando hacia abajo y afuera”.
24 de junio 2008 · 12:23hs
La Cámara Civil condenó a un médico a indemnizar a una paciente a la que operó dos veces para
realizarle implantes en los senos porque, en ambas oportunidades, los pechos quedaron desparejos.
La Sala H de la Cámara, con las firmas de los jueces Jorge Mayo, Jorge Giardulli y Claudio Kiper,
confirmó la condena por mala praxis, aunque reconoció que la paciente cometió algunas acciones que
pudieron haber afectado al buen resultado de las operaciones de cirugía estética.
La paciente en cuestión ya tenía un implante mamario previo de prótesis de 180 centímetros
cúbicos lisos, pero fue madre de mellizos y tras amamantarlos, sufrió “ptosis mamaria”
(mamas caídas), por lo que decidió someterse a un nuevo implante. Así, el 10 de setiembre de 2002
se le extrajeron las viejas prótesis y se le colocaron nuevas, más grandes, de 370 centímetros
cúbicos texturizadas. La paciente debía omitir realizar esfuerzos, pero según consta en el fallo
“refirió esfuerzo físico (levantó a su hijo)”, lo que estaba “contraindicado por
el cirujano” que la operó.
Dos semanas después de la operación, la mujer presentaba “mamas asimétricas a expensas de
la protrusión (hernia de prótesis) en mama izquierda”, pero además, “no se hallaba
conforme con el tamaño de las mamas. El 8 de octubre, “la paciente solicita reoperarse con
aumento del tamaño de prótesis sin esperar el lapso prudencial de seis meses” y ocho días más
tarde es sometida a una nueva intervención, en la cual “se implantaron prótesis Silimed de
mayor tamaño (435 cc), texturizadas, retropectorales; sin drenaje”. El resultado inicial fue
bueno, hasta que el 20 de diciembre “surge que las mamas estaban bien (muy buen aspecto,
blandas, cicatriz sin particularidades”, y a los seis meses “consta que son simétricas
y que presentan un encapsulamiento leve”.
Pero esa situación duró poco, pues una pericia posterior dio cuenta de “dos mamas de gran
volumen: la mama izquierda se encuentra más alta que la derecha. Ambos pezones se encuentran
excéntricos con respecto a la semiesfera protésica, apuntando hacia abajo y hacia afuera (más
acentuado en el izquierdo)”. Para el perito, “a simple vista se puede observar mama
izquierda más alta que la derecha, ambos complejos areola pezón que no coronan los implantes, sino
que están colocados por debajo como si se hubieran subido las prótesis o no se hubieran colocado
correctamente desde el inicio”.
La conclusión final fue que “los senos son indudablemente voluminosos; presentan diferente
forma, tamaño, altura y ubicación con respecto a la línea media. En cuanto al ángulo, orientación y
simetría de los pezones, el complejo derecho es simétrico, el izquierdo se encuentra aplastado en
su porción inferior, pezón apuntando hacia abajo y afuera”. Para solucionar el problema, la
paciente “fue intervenida quirúrgicamente por otro profesional”, e inició las acciones
civiles que, finalmente, le dieron razón a sus reclamos.
Los jueces determinaron que “el encapsulamiento (fenómeno propio del organismo de la
paciente en respuesta al cuerpo extraño introducido que no es predecible ni evitable y por el que
evidentemente el médico no debe responder, a tenor de lo que surge del peritaje no fue la causa del
daño que sigue siendo la incorrecta ubicación de los implantes (culpa del médico)”. “El
resultado adverso de la cirugía plástica practicada a la actora ha sido consecuencia de la errónea
colocación de las prótesis por parte del profesional, encontrándose probado de tal manera la culpa
del demandado”, concluyeron. Así, resolvieron que la mujer deberá recibir una indemnización
de 28.000 pesos más intereses en concepto de daños, gastos y tratamiento psicológico.