Martín Sabbatella reivindica al gobierno nacional, niega que hayan bajado los niveles de adhesión a su candidatura a gobernador bonaerense desde la Casa Rosada y critica a Daniel Scioli por considerar que lleva a la práctica un modelo de gestión “conservador”. En una entrevista con La Capital, el ex intendente de Morón y actual diputado nacional se muestra decepcionado con el socialismo santafesino y avala sin cortapisas la candidatura de Agustín Rossi.
Sabbatella generó polémica en el interior del peronismo con su decisión de habilitar una lista colectora que apoye la reelección de Cristina Fernández de Kirchner pero compitiendo por afuera de la estructura del PJ con su postulación a gobernador. Sin embargo, a lo largo de la charla con este diario argumentará que no hay nada de contradictorio en esa intención. “El kirchnerismo convoca a muchos sectores que no se sienten representados por Scioli. Lo que garantiza mi famosa lista de adhesión es un canal para expresar esa mirada nacional en la provincia”, asegura.
El ex intendente inauguró en Rosario el local de su partido, Nuevo Encuentro, en un intento por nacionalizar hacia el futuro su espacio político. Cree Sabbatella que el kirchnerismo representa el punto iniciático de una construcción política que podrá tener encarnadura autónoma hacia futuro, más allá de los vaivenes y los filtros que siempre surcan los andarivales del Partido Justicialista.
—Usted apoya la reelección de Cristina pero va con su candidatura a gobernador en Buenos Aires. ¿A qué voto apuesta?
—Tengo una mirada muy crítica del gobierno de Scioli, de lo que pasa en la provincia. Represento un espacio que tiene una valoración profunda del rumbo nacional y que es crítico de Scioli, quien no expresa lo mismo que Cristina. El nivel de transformación profunda que vive la Argentina desde 2003 no se expresa en la provincia de Buenos Aires. El kirchnerismo convoca a muchos sectores que no se sienten representados por Scioli. Lo que garantiza mi famosa lista de adhesión es un canal para expresar esa mirada nacional en la provincia. Mi gobierno en Morón implicó una novedad transformadora y rupturista y ahora la propuesta interpela a muchísimos sectores. Mi fuerza se nutre de hombres y mujeres que vienen del peronismo, radicalismo, socialismo e independientes.
—¿No es una limitante para su crecimiento que esté tan enclavado en el aval al kirchnerismo?
—Yo creo que lo que vive la Argentina debe ser cuidado y protegido. El rumbo, las ideas, el pensamiento que se ordenan a nivel nacional representan nuestro pensamiento. Tengo diferencias en términos de estructuras partidarias, así lo planteamos, y lo hacemos desde nuestra fuerza, con autonomía. Sí creo que hay que renovar las fuerzas políticas, el sistema político. Se deben transformar muchas cosas de las prácticas políticas, pero el rumbo del país es necesario para avanzar en las cosas pendientes y para poner en la agenda esas otras cuestiones. No significa que esté todo hecho, hay que profundizar y seguir mejorando. Pero la única manera de lograrlo es seguir por este camino. En el Congreso hemos presentado muchas propuestas que aún están pendientes, como reformas tributarias que gravan rentas extraordinarias.
—¿Pero eso no se plantea también desde la oposición?
—El arco opositor lo que plantea es retroceder, volver al pasado con recetas que ya fracasaron. Para mí es natural poner el cuerpo por la reelección de Cristina; es la Argentina la que necesita que ella sea reelecta. Todo lo que yo planteo o está en marcha o se puede poner en la agenda si se sigue por este camino.
—En un momento pareció que su candidatura a gobernador tenía todo el aval de la Casa Rosada pero ahora la impresión es que hubo un cierre de filas con Scioli.
—¿Por qué da esa sensación?
—Se lo ve a Scioli mucho más activo junto a la presidenta y se notan menos apoyos kirchneristas hacia usted.
—No encuentro ningún cambio. Sí hay un cambio en la estrategia comunicacional del gobierno de Scioli, pero es parte de un debate político. Yo me siento parte de un proyecto y planteo la adhesión a la reelección. Eso no cambió nada, tengo el mismo vínculo y la misma relación. El gobierno de Scioli tiene una mirada conservadora, está lejos de transformar la provincia. El gobierno nacional planteó una gobernabilidad rupturista, transformadora, que corre la frontera de lo posible, que vence la cultura de la resignación, que empuja recurrentemente. El gobierno provincial es conservador y tiende a sostener el statu quo. Lo que hace Scioli en materia de seguridad, por ejemplo, tiene que ver con la demagogia y el efectismo mediático; manodurismo sin resultados.
—Cuando hablamos con usted la primera vez era “Sabbatella versus los barones del conurbano”. Hoy apoya a la misma candidata a presidenta que ellos. ¿Cambió usted o cambiaron esos intendentes?
—La relación nuestra con la estructura degradada y viciada del conurbano no cambió en lo más mínimo, tampoco mi visión sobre ellos. Yo tengo un modelo de gestión y lo llevé a la práctica. No hay contradicción entre el apoyo al gobierno nacional y la estructura política que existe en muchos municipios del conurbano. Son dos situaciones distintas. Que esos sectores coincidan en el liderazgo de Cristina a mí no me hace coincidir en el territorio con esos intendentes. Las identidades partidarias rompieron la pertenencia a los partidos, lo que sucede en el peronismo y en el radicalismo son ejemplos claros. El kirchnerismo puede ser una identidad fundante de una nueva etapa del movimiento nacional y popular de la Argentina.
—¿Que lo rodeen dirigentes como Marcelo Brignoni y José Tessa, que rompieron con el socialismo, es un dato de su alejamiento de Binner?
—No comparto la lectura que Binner tiene sobre lo que pasa en la Argentina y la región. El socialismo optó por constituirse en un espacio fuertemente opositor al kirchnerismo. Lo que vive la Argentina no es más de lo mismo. Se expresó en cuestiones concretas como la asignación universal, la ley de medios, las jubilaciones, el matrimonio igualitario, la creación de puestos de trabajo. En Santa Fe, la propuesta transformadora y popular es la que expresa Rossi. Agustín garantiza poner a Santa Fe en la dirección del crecimiento y la inclusión que vive la Argentina. Por eso lo apoyamos en la interna y ahora que debe enfrentar al candidato socialista. l