A pocos metros, en Gualeguaychú, la manifestación de los tractores y camiones detenidos a la orilla
de la Ruta 14, a la altura del ya emblemático kilómetro 53, se roban toda la atención. Allí se
asienta uno de los focos principales del conflicto agropecuario con el gobierno. Pero otra protesta
que también origina bloqueos e interrupciones en el tránsito es la de los asambleístas de
Gualeguaychú contra Botnia.
En realidad esa fue la primera gran manifestación de la ciudad entrerriana, pero hoy, la
mayoría de los manifestantes parecen haber "elegido" volcarse al conflicto del campo.
Por eso, Sira Muñoz improvisa un corte de la Ruta 136. La mujer se encuentra a la altura de
Arroyo Verde, a 8 kilómetros del puente internacional que une a la Argentina con la papelera, que
sigue operando, tal como delata el humo de sus chimeneas. Aunque parezca increíble, hoy sólo una
persona es la responsable de impedir la comunicación binacional entre nuestro país y Uruguay en ese
tramo.
Según consigna el diario La Nación, hay dos o tres personas más por zona, pero la única que
permanece estoica es Sira, una mujer de poco más de 60 años. "Si me quieren sacar, sé que el pueblo
de Gualeguaychú se movilizará de nuevo aquí", manifestó al matutino.
"Entiendo y apoyo el reclamo del campo, pero los productores tienen que saber que hoy pelean
por las retenciones, pero que mañana van a tener que venir de nuevo acá, porque no van a poder
vender nada por la contaminación de Botnia", agrega la mujer.
Mientras tanto, el piquete rural se encuentra unos 30 kilómetros al sudoeste de donde está
instalada Sira Muñoz. Desde allí casi no se acuerdan de Botnia, pero ella no piensa retirarse de su
puesto. Hasta se edificó una construcción con ladrillos en la que hay un televisor satelital para
hacer más entretenidas las horas de espera. "Me cuentan que en Fray Bentos ya no pueden tomar agua
potable por la contaminación". De esta manera, Muñoz resume el porqué de su lucha.