Hoy se define el nuevo mapa del poder en el país. La composición de ambas cámaras en el Congreso Nacional es parte de la elección de hoy. La Cámara de Diputados renovará 130 bancas, donde el Frente de Todos (FdT) confía en poder volver a conducir este cuerpo parlamentario en los próximos dos años si repite los resultados de las elecciones primarias, y Juntos por el Cambio espera poder mantener un interbloque cercano a los 110 legisladores. De las bancas en juego, diez corresponden a la provincia de Santa Fe. El Senado, por su parte, renueva 24, de las que el peronismo arriesga trece, y el oficialismo ocho. La provincia no renueva legisladores en esta Cámara.
Diputados mostrará el nivel de polarización que existe entre el FdT y Juntos por el Cambio que quedó demostrado en las Paso, donde entre ambas fuerzas obtuvieron casi el 80 por ciento de los votos.
El kirchnerismo y sus aliados podrían sumar unas 120 bancas —cerca del quórum de 129—, y Juntos por el Cambio unos 108, lo cual refleja la marcada paridad que se mantendrá en este cuerpo, escenario que impedirá sancionar leyes electorales, penales o ligadas a la coparticipación federal, que requieren mayorías especiales, imposibles de lograr si no existe un amplio consenso político.
En la elección de hoy, los diferentes bloques peronistas que hoy respaldan al Frente de Todos arriesgan 68 bancas de las 118 que tienen en conjunto —aunque en la actualidad están divididos en tres bloques principales, y otros de menor cuantía—, mientras que Juntos por el Cambio pone en juego 46 de sus 107 diputaciones.
La composición del cuerpo que asumirá el 10 de diciembre implicará el retorno a Diputados del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, y del gobernador radical de Mendoza, Alfredo Cornejo; la reelección de los jefes de la UCR, Mario Negri, y del PRO, lvaro González, y la continuidad de los camporistas Máximo Kirchner y Andrés Larroque, entre otros.
En el Frente de Todos estiman que reunirán entre 120 y 122 bancas si se repiten los resultados de las Paso, y sostienen que tendrán desde diciembre el apoyo de sus aliados del Frente Cívico santigueño y de los misioneros, que les permitiría alcanzar la mayoría en el cuerpo legislativo.
Si logra ese objetivo podrá alcanzar la presidencia de Diputados, comprometida a Sergio Massa, y la conducción de comisiones clave como Presupuesto, Asuntos Constitucionales, Finanzas y Legislación Penal, hoy en manos de Cambiemos.
El oficialismo pone en juego 46 de los 107 bancas, ya que conserva por cuatro años los 61 lugares logrados en la elección de octubre del 2017. Si se repiten los números de las Paso, el oficialismo deberá hacer esfuerzos para conservar la unidad del interbloque.
Así, el PRO, que hoy tiene 55 escaños, bajaría a 45 y quedaría en igualdad de fuerzas con el radicalismo, que pasaría de 39 a 45, aunque éste último sumaría a tres aliados.
La Coalición Cívica pasaría de 10 a 14 escaños, mientras que recuperaría presencia el Frente Cívico de Córdoba, con el ingreso de Luis Juez.
Un tercer sector, dentro del escenario general, lo integran los siete diputados que en esta elección se referencian en la candidatura presidencial de Roberto Lavagna, y que incluye a ex massistas, socialistas y peronistas.
La Izquierda, en tanto, que quedaría desde diciembre con dos diputados, completa el esquema parlamentario de una cámara que a priori aparece como menos atomizada que en los últimos años.
En el Senado
El peronismo arriesga hoy más de la mitad de las 24 bancas que deben renovarse en este turno, y que corresponden a los senadores elegidos durante las legislativas de 2013.
El justicialismo y sus aliados pondrá en juego trece bancas.
El oficialismo, en tanto, debe renovar ocho lugares, contando a integrantes del interbloque Juntos por el Cambio, pero también a peronistas aliados como el rionegrino Miguel Angel Pichetto y el salteño Juan Carlos Romero.
El resto de las bancas está en manos de partidos provinciales: el Movimiento Popular Neuquino, el Frente Cívico de Santiago del Estero y el Partido Renovador de Salta.
Por otro lado, sólo ocho senadores nacionales buscarán la renovación de sus mandatos.
En este turno, los distritos que deben elegir representantes en el Senado son Tierra del Fuego, Entre Ríos, Salta, Río Negro, Neuquén, Santiago del Estero, Chaco y la ciudad de Buenos Aires.
Además, dos senadores nacionales se enfrentarán el domingo como candidatos a vicepresidente: el rionegrino Pichetto, compañero de fórmula del presidente Mauricio Macri; y la representante de Buenos Aires, Cristina Kirchner, como ladera de Alberto Fernández.
El mandato de Pichetto finaliza en diciembre y el de la ex presidenta es hasta 2023,
Los ocho senadores que buscarán su renovación pertenecen a sólo seis provincias: Entre Ríos, Chaco, Neuquén, Salta, Río Negro y Santiago del Estero.
Parlamento. El nuevo mapa de poder tendrá su lugar en el Congreso.