El canciller Héctor Timerman se reunirá nuevamente con su colega uruguayo, Luis Almagro,
para buscar una solución definitiva al conflicto de las papeleras, mientras la Asamblea
Ambiental de Gualeguaychú analiza marchar a la embajada de Finlandia en Buenos Aires.
Dirigentes de la asamblea, que el lunes cumplirán un mes del levantamiento del corte de
ruta en el marco de una tregua con el gobierno, dijeron que intentarán que representantes de
Finlandia “den la cara” ante el conflicto que enfrentó a las autoridades de
Argentina y Uruguay durante tres años por el emplazamiento de una empresa de ese país en Fray
Bentos y su negativa a mudarse.
La nueva reunión entre Timerman y Almagro se concretará esta semana en el marco de los
encuentros que en los últimos días mantuvieron los diplomáticos en busca de acordar un
monitoreo en la planta de la papelera UPM, ex Botnia, y el río Uruguay en la zona para
determinar si su actividad genera contaminación como sostienen los pobladores de
Gualeguaychú.
Timerman, quien llegó esta mañana junto a la presidenta Cristina Fernández de una visita
oficial a China, aseguró a la prensa que tenía previsto reunirse “esta semana”
con Almagro para avanzar en un “acuerdo final” sobre el control del río, según
informó el portal oficial del Gobierno.
En tanto, la Asamblea Ciudadana Ambiental de Gualeguaychú evaluaba la posibilidad de
organizar una movilización hacia la Embajada de Finlandia, en el barrio porteño de Retiro, en
el marco de su protesta contra la pastera UPM, integrada por capitales de ese país,
entre ellos Botnia.
La propuesta que debate la Asamblea fue presentada por el asambleísta Roberto Marchesini y
contempla la realización de un reclamo frente a la sede diplomática en la ciudad de Buenos
Aires.
Al respecto, el asambleísta José Pouler dijo a DyN que de concretarse la movilización en
fecha a definir “buscaremos recordar públicamente que Finlandia, sede de la empresa
Botnia, tiene una responsabilidad en este conflicto”.
“Queremos que Finlandia dé la cara, porque siempre en el conflicto se manejó como si
no tuviera relación con la empresa de su país, cuando sabemos que hay presencia del Estado en
empresas vinculadas a Botnia”, indicó.
Consultado sobre la posibilidad de que Botnia se niegue a controles internos que podrían
acordar los cancilleres de la Argentina y Uruguay, Pouler admitió que esa era una de las
preocupaciones de los pobladores de Gualeguaychú.
“Tememos que Botnia se niegue al control pero esa empresa debe entender que esto no
es una triple frontera entre Argentina, Uruguay y Botnia, sino que se trata de una empresa
que está en otro país que tiene un conflicto serio con su vecino”, advirtió.
Pouler señaló que era “posible que Botnia, para negarse a los controles, argumente
que existe un tratado firmado entre Finlandia y Uruguay”.
“Por eso es que apuntamos a que Finlandia se haga cargo de su responsabilidad en la
solución del conflicto entre Argentina y Uruguay”, dijo el asambleísta al recordar que
a diferencia de España, que intercedió para la mudanza a otra ciudad de una papelera de
capitales de ese país, el gobierno de Helsinki se desentendió del problema y la compañía
finlandesa rechazó los múltiples pedidos de relocalización.
La propuesta de Marchesini indica que se invitará a sumarse a organizaciones vecinales y
ambientales de Buenos Aires. (DyN)