El cineasta estadounidense Oliver Stone se entrevistó en Buenos Aires con la presidenta
Cristina Fernández de Kirchner con el objetivo de recabar su testimonio para el documental que
prepara sobre América Latina.
Después de reunirse el miércoles con los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Paraguay,
Fernando Lugo, Stone charló con la mandataria argentina en la quinta presidencial de Olivos. Juntos
recorrieron los jardines de la residencia, y la presidenta le mostró el automóvil que utilizó el
tres veces presidente argentino, Juan Domingo Perón, y quien fuera su esposa, Eva Duarte, a la que
Fernández ha calificado como una "heroína" y una "figura irrepetible. En el encuentro también
participó el ex presidente Néstor Kirchner.
Tras la entrevista, el cineasta explicó a los periodistas que el documental "intenta explicar
a América del Norte lo que pasa en América del Sur". "Trato de explicar el cambio que se produce en
esta región y explicársela al público de Europa y América del Norte", dijo Stone, quien aseguró que
le ha "impresionado mucho" lo que le dijo la mandataria argentina durante la charla.
"Un mundo en duda"
Por su parte, la jefa de Estado consideró que el documental que filma el cineasta
estadounidense va a permitir "hacer conocer que es lo que ocurre en esta parte de América del Sur",
además de "traducir qué es lo que pasa en un mundo donde todo se está poniendo en duda".
"Es una excelente idea que un director del prestigio de Oliver Stone se haya interesado por
decodificar e interpretar lo que sucede en esta región y dar una versión diferente de lo que ocurre
aquí", destacó Fernández a la prensa tras la reunión.
El cineasta expresó en reiteradas ocasiones que su próxima obra se enfocará en el mandatario
de Venezuela, Hugo Chávez, y en la aparición de políticos de izquierda en Suramérica en los últimos
años. Para llevar adelante el documental, Stone visitó la semana pasada a Chávez, a quien acompañó
al pueblo de Sabaneta, en el estado Barinas, donde hace 54 años nació el presidente venezolano y
recorrieron algunas de sus calles.