El presidente electo, Mauricio Macri, se comunicó ayer telefónicamente con la presidenta Cristina Kirchner para transmitirle su decisión de “respetar la tradición” del traspaso del mando y su intención de que participe de la ceremonia en la Casa Rosada. Macri sostuvo que durante la conversación telefónica, le pidió a la Cristina Kirchner que “reconsidere” su posición, pero “ella se mantuvo en su punto”.
“Le pedí que reconsidere su posición y le dije que recibir los atributos de mando en el Congreso va contra la tradición. Ella insistió en su punto, hay que reconocer que cuando se le mete una idea no es fácil”, dijo a la noche en el programa Mirtha Legrand, de Canal 13. Y dijo que en caso de que Cristina Fernández se niegue a hacerlo, "los artibutos los entregará la Corte Suprema".
Al explicar su posición en pos de recibir el bastón de mando y la banda en la Casa Rosada de manos de la actual presidenta, Macri dijo que se basa en respetar la “historia y las tradiciones” del país. “No es que yo quiera, yo quiero un país normal, que respeta su historia y sus tradiciones. El artículo 93 dice que la jura debe hacerse en el Congreso Nacional y no habla del traspaso, pero el reglamento de Presidencia habla en su artículo 114 de que el traspaso de los atributos se debe hacer en el Salón Real de la Casa Rosada. Así lo hicieron Perón, Yrigoyen, Alfonsín y Menem”, señaló.
La noticia había sido informada en primer lugar por el frente Cambiemos mediante un comunicado oficial en el que se informó además el cronograma definido por Macri para la ceremonia de cambio de Gobierno el 10 de diciembre. Sin embargo, poco después el Senado de la Nación emitió un comunicado firmado por su presidente, Amado Boudou, en el que ratificó que será en el Congreso donde “se hará entrega de los atributos presidenciales”, como pretende Kirchner.
Según el comunicado de Cambiemos, durante la comunicación telefónica Macri le informó a la presidenta saliente el programa oficial de los actos del 10 de diciembre y le transmitió su decisión de “respetar la tradición”. De esta manera, aludió a la costumbre de que el presidente entrante reciba los atributos (el bastón de mando, la banda presidencial y la Marcha de Ituzaingó) de manos del mandatario saliente en el Salón Blanco de la Casa Rosada.
La ceremonia fue así hasta 2002, cuando Eduardo Duhalde tomó los atributos en el Congreso porque había sido elegido presidente por la Asamblea Legislativa y luego Néstor y Cristina Kirchner continuaron eligiendo ese escenario. Durante la conversación, Macri también le transmitió a la mandataria su intención de que participe de la ceremonia en la Casa de Gobierno, luego de que dirigentes de su espacio dijeran en los últimos días que Cristina Kirchner podía ausentarse si así lo deseaba.
Sin embargo, poco después el Senado emitió un comunicado firmado por Boudou, en el que informó que puso “ha disposición del Presidente entrante el total de las invitaciones” para la ceremonia del 10 de diciembre en el Congreso. Se trata de un gesto, dado que las invitaciones se había repartido en un principio a razón de 250 para Cambiemos y 250 para el Frente para la Victoria, según indicaron fuentes que participan de la organización a NA.
No obstante, el párrafo sobresaliente del comunicado es el que señala que se trata de las invitaciones “para la ceremonia de transmisión del mando a realizarse el día 10 de diciembre a las 12 horas ante la Asamblea Legislativa en el edificio del Congreso Nacional, donde también se harán entrega de los atributos presidenciales”. Con esa última frase, el oficialismo dejó trascender que mantiene firme su decisión de realizar el traspaso de los atributos en el Congreso y no en la Casa Rosada, como quiere Macri. El comunicado se suma a uno emitido en el portal Sala de Prensa, oficial del Gobierno, y en la cuenta de Twitter de la Casa Rosada, en donde se ratificó que “a partir de las 11 horas, en el Congreso de la Nación comenzará la sesión especial que dará inicio al traspaso del mando”.