El jefe de Gabinete nacional y candidato a vicepresidente, Agustín Rossi, procuró bajarles el tono a las declaraciones del gobernador Omar Perotti, quien dijo que votaría a Javier Milei en caso de que se diera una segunda vuelta con Patricia Bullrich y abrió debate en el peronismo. "Me quedo con la parte en la que dice que votará en la primera vuelta a (el candidato presidencial oficialista) Sergio Massa”, enfatizó.
"Lo demás es adelantar un escenario que no sabemos si se va a dar", añadió Rossi, en declaraciones a LT8, en un esfuerzo por ponerle punto final al debate. Un día antes, Perotti había afirmado: "Entre Bullrich y Milei, voto a Milei. Quiero que Massa sea presidente, pero si queda esa opción en el balotaje, que espero no ocurra, voto a Milei. Porque lo de Bullrich ya lo vimos”.
Sin embargo, como consecuencia que el sacudón que sus palabras generaron en el peronismo, Perotti trató de enfriar los ánimos. “Seré muy claro, porque están generando muchos rumores. Voté a Massa y volveré a votarlo. En el balotaje estará Massa y voy a ir por ahí, sin dudas”, agregó el gobernador.
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Paralelamente, Rossi sintonizó con la oferta electoral de Juntos Avancemos de cara a las elecciones del 10 de septiembre próximo. "Apoyamos a nuestros candidatos en cada una de las categorías, a Marcelo Lewandowski como gobernador y a Juan Monteverde como intendente de Rosario", aseveró.
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"En Santa Fe tenemos un cronograma electoral que se superpone al nacional. Y tenemos un buen candidato a gobernador, como Lewandowski, y otro buen candidato a intendente de Rosario, Monteverde. Aspiramos a hacer la mejor elección posible en un escenario complicado", continuó Rossi.
Cristina
En otro orden, a un año del intento de magnicidio de la vicepresidenta Cristina Kirchner, el jefe de Gabinete lo definió como “el hecho de violencia política más importante desde que se recuperó la democracia".
"Es conmocionante ver ese revólver a centímetros de la cabeza de Cristina. Genera impacto imaginar si esa bala hubiese salido. Sobre Cristina hay una campaña de discursos de odio estigmatizantes”, advirtió.
En esa línea, Rossi sentenció: “La magnitud del hecho se debería haber investigado. Después de un año, la Justicia posibilitó que abran el teléfono de (el diputado nacional) Gerardo Milman. Sus colaboradoras contaron que las obligaron a resetear su teléfono para borrar cualquier tipo de memoria. A la política argentina le faltó más contundencia al condenar el intento de homicidio de Cristina”.