Los recaudadores de la campaña presidencial 2007 de Cristina Kirchner fueron sobreseídos por el cuestionado juez federal Norberto Oyarbide en una investigación por presunto lavado de dinero, en el marco de la causa por la llamada "mafia de los medicamentos".
Fuentes judiciales informaron que el magistrado sobreseyó al ex superintendente de Servicios de Salud (SSS) Héctor Capaccioli, al ex legislador kirchnerista Sebastián Gramajo y al ex director de Lotería Nacional Hérnan Diez.
Se trata del tramo de la causa en la que todos estaban acusados por el encubrimiento de supuestas maniobras de lavado de dinero a raíz de los cheques que manejaban los laboratorios vinculados a la mafia de los medicamentos.
También fueron sobreseídos los empresarios farmacéuticos Gabriel Brito y José Luis Di Leva y el cooperativista Diego Tarruela.
Brito era el titular de Global Pharmacy, y él mismo confesó haber sido aportante de la campaña del Frente para la Victoria con unos 310 mil pesos que habría otorgado a Capaccioli.
En una primera resolución, Oyarbide los procesó por encubrimiento de lavado de dinero pero la Cámara Federal les dictó la falta de mérito y, ahora, el juzgado a cargo de Oyarbide finalmente los desvinculó de la causa ante la falta de pruebas.
"En virtud de no haberse logrado incorporar nuevos elementos que permitan adoptar un temperamento de mayor gravedad procesal, y no restando más medidas conducentes por realizar, es que corresponde evaluar la adopción de una resolución de carácter definitivo", justificó el magistrado.
El tramo que sí avanzó es aquel sobre la "mafia de los medicamentos" y en donde esas mismas personas van a juicio oral y público, sumado al sindicalista Juan José Zanola y su pareja, Paula Aballay.
En este caso, Capaccioli está acusado de haber otorgado unos 48 millones de pesos a 52 obras sociales en concepto de reintegros por tratamientos médicos complejos que en verdad nunca se realizaron, con lo cual se presume hubo una defraudación al Estado.
Sin embargo, la resolución del juez generó fuertes críticas de la oposición debido a las acusaciones que acumula en el Consejo de la Magistratura por haber actuado presuntamente en consonancia con los intereses del gobierno.
En ese sentido, el diputado nacional Roy Cortina (Partido Socialista en Unen) afirmó en referencia al sobreseimiento que "la impunidad de Capaccioli garantizada por Oyarbide es el símbolo de la hipocresía de un gobierno nacional que dice querer combatir la droga y recibe aportes de campaña de empresas ligadas al narcotráfico".
Cortina consideró que el juez Oyarbide es el "garante de la impunidad del gobierno" que conduce Cristina Fernández.
En tanto, su compañero de bloque Fernando Sánchez dijo que "en los tiempos en que La Cámpora y el Frente para la Victoria rescatan a Oyarbide del juicio político, éste les devuelve favores sobreseyendo a Héctor Capaccioli en la causa por la mafia de los medicamentos y el financiamiento ilegal de la campaña presidencial de Cristina Kirchner, en una nueva demostración de que no puede ser más juez".
"Cualquiera puede ser acusado por este juez corrupto, menos personas con poder. Oyarbide es la garantía de impunidad del poder kirchnerista", afirmó.