La diputada nacional del PRO, Patricia Bullrich, destacó la masiva movilización de ayer en Plaza de Mayo y dijo que se trató de una marcha "conmovedora e impresionante".
"Había una persona pegada a otra, empapada. Y me impresionó y me llenó de esperanza que la gente está hablando de lo que viene, de una Argentina que sea republicana y en libertad", señaló la legisladora a "El primero de la mañana" de La Ocho.
Afirmó que la marcha le "dejó mucho emoción" y que se dio cuenta "de la magnitud de la marcha" por las tres horas que demoró en llegar desde la Plaza de los dos congresos hasta Plaza de Mayo.
"La gente estaba re tranquila, sin ningún tipo de agresión. Me pareció la marcha más tranquila que hemos vivido", agregó Bullrich. Sostuvo que "el mensaje fue: queremos vivir en un país en paz", y estimó que "se viene una república distinta".
De todas formas, para la diputada del PRO "el gobierno no toma nota, sigue con su discurso y no cambia", pero está convencida "que viene un cambio" a lo que describió como "una década de democracia restringida, de libertad de expresión atada y de construcción de un multimedios oficialista".
Bullrich también fue consultada por la gran cantidad de llamadas que, según trascendión, intercambió con Nisman el día antes de su muerte. "El fiscal a mi me llamó por teléfono y me citó, además yo lo invité a la Comisión de Legislación Penal y las llamadas que tuve con él fueron para tener una coordinación respecto de la reunión a la que iba a vernir. Así que me parece absolutamente normal", contestó.