El ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández afirmó ayer que "es una locura" la denuncia en su contra por haber vendido supuestamente parte de su patrimonio luego de ser inhibido por la Justicia.
El ex jefe de Gabinete Aníbal Fernández afirmó ayer que "es una locura" la denuncia en su contra por haber vendido supuestamente parte de su patrimonio luego de ser inhibido por la Justicia.
"Cómo voy a estar preocupado si la causa es una locura?", dijo Fernández, al ser consultado sobre la acusación de la fiscal general Gabriela Baigún.
La funcionaria consideró que Fernández le mintió a la Justicia al afirmar que carecía de patrimonio embargable, cuando peritajes que se hicieron luego en sus cuentas bancarias confirmaron que no era así.
Fue en el marco de la causa por presuntas irregularidades en el Plan Qunita, en la que está investigado él y otros ex funcionarios y empresarios, sobre quienes pesan medidas similares sobre sus bienes.
En este contexto, la fiscal señaló que, además, el ex jefe de Gabinete vendió dos automóviles, un BMW y un Toyota, por un valor de más de un millón de pesos, cuando ya se había ordenado su inhibición general de bienes.
Ayer Fernández indicó que preguntó en el juzgado si "podía cambiar el auto porque ya tenía unos cuantos años y me dijeron que no había problema porque no estaba notificado el registro automotor", pero ahora "aparece que yo no reconocí que tenía bienes que podían ser embargados".
"Yo soy un tipo público, hay una declaración jurada pública ¿cómo no saben qué bienes tengo? Yo pedí la autorización y creí en lo que ellos decían, por eso vendí dos autos y me compré uno que equivale a los dos autos; a mi patrimonio lo conservo para no tener conflictos con este tema", indicó.
Si bien afirmó no estar preocupado por las causas en su contra, ya que "son un chiste", agregó: "Si mañana inventan que me encontraron teniendo sexo con uno oso carolina en el Teatro Colón y por eso me meten en cana, es posible".
De todos modos no dejó de quefarse: "Me hicieron perder las elecciones (como candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires) cuando me inventaron que era narcotraficante". Se refirió así a un informe presentado por el programa Periodismo Para Todos en agosto del 2015.
En ese marco, consideró que "instalan conflictos y quieren discutir si un funcionario vendió dos autos por un millón de pesos y compró otro", mientras que "la realidad es que Argentina se ha convertido en un mamarracho porque le sacan 100 millones de pesos a los jubilados, licuan paritarias y la Asignación Universal por Hijo".
Fernández está involucrado en la causa que estudia supuestas maniobras ilegales en las licitaciones para la fabricación de los kits que otorgaba el gobierno de Cristina Kirchner a madres en situación de vulnerabilidad social. Este programa consistía en la entrega de una cuna y elementos para el bebé recién nacido y la mamá.
En esta causa ya se encuentran procesados diversos ex funcionarios que intervinieron en el proceso de licitación en 2015 por haberse verificado irregularidades originadas en el propósito de obtener un beneficio económico a través de compras de 150.000 kits con un sobreprecio de alrededor de 3.000 pesos por cada uno, lo que arroja un perjuicio para el Estado de al menos 450 millones de pesos.
Además, la licitación se habría direccionado hacia empresas cuyo objeto social y actividad no guardaban relación alguna con los rubros licitados.