Antonio Bonfatti | Bío | El ex gobernador y presidente de Diputados será candidato a gobernador si su partido se lo pide. Duras críticas al gobierno nacional y apuesta a un proyecto opositor multisectorial.
Por Mauricio Maronna
Antonio Bonfatti | Bío | El ex gobernador y presidente de Diputados será candidato a gobernador si su partido se lo pide. Duras críticas al gobierno nacional y apuesta a un proyecto opositor multisectorial.
Antonio Bonfatti fue el socialista más crítico con el gobierno nacional. Dice que le hubiera gustado errar el diagnóstico, y carga con todo contra las políticas de Mauricio Macri. Sigue sin definir públicamente su postulación a gobernador y sostiene que Miguel Lifschitz continúa los proyectos del Frente progresista.
Según el presidente de la Cámara de Diputados, hay mucha gente que se arrepiente de haber votado a Cambiemos y propone un acuerdo electoral opositor, pero siempre en base a un proyecto.
"Veo al país con mucha preocupación. Gestionar es una cosa y ganar las elecciones con el estilo Durán Barba es otra. Las medidas que tomó este gobierno son coyunturales, no pertenecen a un plan económico prefijado. Comenzaron con una devaluación del 34 por ciento, y ese fue el inicio de la transferencia de recursos de los sectores de menores ingresos a los más concentrados de la economía. Y la reforma previsional, la pretendida reforma laboral, la inflación que sigue creciendo, la toma de deuda externa, los graves errores que cometieron intentando frenar la corrida cambiaria. Pero lo que me preocupa es la soberbia de este gobierno, de no escuchar, de encerrarse, de no convocar a los productores y responsables de las economías regionales. Los ministros propician negocios para las empresas petroleras, gasíferas, eléctricas. Propician negocios para el mismo sector, del cual ellos provienen", grafica el ex gobernador.
—¿La política económica y su derivación en esta crisis es un error del gobierno o existe una intencionalidad con determinadas medidas?
—Si usted vivió y se crió de una forma, mamó una determinada cultura, es lo que cree. Y lo que pasa es lo que ellos creen. No le pida al que no entiende de política económica sensibilidad por los otros o pensar en los jubilados. Eso no existe. Es como pedirle peras al olmo. No los juzgo por buenas o malas personas, pero en el actuar reproducen partes de su vida.
—Tuvo desde el arranque de Cambiemos la posición más crítica, y algunos se lo reprochaban. ¿Ahora dice: "Vieron que tenía razón?".
—Sí. Y agregue que yo en aquel momento decía: "Ojalá que me equivoque". Quienes tenemos unos años y vivimos los 90, sabemos que esa teoría de acumulación no existió nunca en el mundo. Hay que determinar impuestos que graven los bienes suntuosos, las grandes herencia, los grandes patrimonios. Eso quisiera haber visto.
—¿Tiene tiempo el gobierno para enderezar el barco o el contexto mundial hará que esto sea inexorablemente así, por lo menos hasta el 2019?
—No es el contexto mundial, porque de ser así Bolivia estaría padeciendo lo mismo y tiene una inflación del 3 por ciento anual. Uruguay tiene el 6 por ciento, Chile por allí. Tienen tiempo pero no los veo predispuestos a revertirlo por su matriz cultural. Hay un 43 por ciento de evasión de las grandes multinacionales, y eso implica el 5 por ciento del PBI. No les interesa resolver el problema.
—¿Pero usted cree, como contraplano, que existe un frente opositor capaz de ganar las elecciones?
—No me gusta formar un frente anti, sí opositor al gobierno. Nosotros inauguramos la filial Buenos Aires del Cemupro y dijimos que pasaron 35 años de democracia pero seguimos con el 34 por ciento de pobreza, trabajo en negro, 17 millones de personas viviendo en el Gran Buenos Aires, un país despoblado, las economías regionales que van y vienen. ¿Cuándo vamos a tener un proyecto de Nación pensando en los argentinos? Todos hemos cometido errores. Si no nos sentamos a construir una alternativa, coincidiendo en 10 ó 15 puntos, seguiremos con este panorama sin salida.
—Esa foto del Cemupro mostró a referencias de varios partidos. ¿Es posible darle una salida electoral?
—No es la intención. Esa convocatoria es para sumar ideas y construir un proyecto. ¿Si después hay salida electoral? Ojalá.
—¿Será candidato a gobernador?
—Las decisiones electorales se toman en forma colectiva. Jjamás accedí a un cargo por haberlo decidido en forma individual. Si el partido entiende que tengo asumir un cargo de responsabilidad, lo charlaremos adentro.
—Hay posibilidades de que salga la reforma constitucional?
—Sí. Se puede seguir con esta Constitución, pero hay que aggiornarla. Los tiempos dependen de la voluntad de ambas Cámaras.
—¿Los problemas que tiene Cambiemos con la economía son tan severos como los que tiene el Frente Progresista con la seguridad? Le balearon su casa y sucedió lo propio hace unos días con el juez Manfrín. Es gravísimo.
—La diferencia es que esos hechos fueron contra un gobierno que ha accionado, y que intentó dar respuestas. Hemos bajado la cantidad de delitos, no el consumo de drogas, porque eso depende de las personas. Y mientras haya consumo, habrá tráfico. El tema es cómo hacemos para que no haya violencia entre los que trafican.
—¿Le preocupa que nunca agarren a nadie, como sucedió con los que balearon las propiedades del juez?
—Me preocupa pensar que agarrando al chiquitito vamos a agarrar el grande, y la droga sigue penetrando por el río y la frontera.
—¿Está a favor de que el narcomenudeo sea investigado por la Justicia provincial?
—Históricamente el socialismo estuvo en contra. Lo que cabe es una coordinación entre las fuerzas y entre la Justicia nacional y la provincial. Hay que tomar al adicto como un caso de salud pública.
—¿Observa algún cambio de actitud en la gente que votó a Cambiemos en Rosario?
—En diálogos casuales y con amigos, muchos dicen: "Me equivoqué". Los entiendo, porque veníamos de un gobierno autoritario como el de Cristina, con inflación galopante, decrecimiento de la economía y corrupción. La gente buscó una opción para cambiar las cosas. Entiendo a los que dicen que hoy estamos igual o peor que antes.
—¿Qué calificación le pone a Lifschitz?
—No me gusta calificar. Miguel siguió los proyectos que se iniciaron en el Frente Progresista. Hay un plan estratégico que se sigue en salud, educación, apoyo a las pymes, jubilados, la Justicia.
—¿Quiere agarrar de nuevo la abrochadora que tenía en Casa de Gobierno?
—Ahora conozco más que la abrochadora. Hay cosas más modernas.