Un total de 32.037.323 argentinos elegirán candidatos a presidente entre 15 fórmulas, además de postulantes a senador y diputado nacionales (para cubrir, respectivamente, 24 y 130 bancas) y 43 legisladores al Parlamento del Mercosur (Parlasur), mientras que en seis provincias los comicios definirán a los postulantes para gobernador y cargos locales. En Santa Fe, además de lo vinculado a las presidenciales y al resto de los cargos, el interés estará en saber cómo se posicionan a senador Omar Perotti (FpV), Hermes Binner (FP) y Carlos Reutemann (PRO).
Según la Dirección Nacional Electoral, un total de 13.881 establecimientos estarán destinados a lo largo del país para la ubicación de las 94.979 mesas electorales, que requerirán la labor de 189.958 autoridades comiciales.
Con internas para los distintos cargos en el Frente para la Victoria, Cambiemos, UNA y el Frente de Izquierda, las Paso funcionarán como una gran encuesta de cara a los comicios generales que tendrán lugar el 25 de octubre.
El Frente para la Victoria lleva a Daniel Scioli como único precandidato a la Presidencia, acompañado por el actual secretario de Legal y Técnica del gobierno, Carlos Zannini, pero observará con expectativa a la provincia de Buenos Aires, donde Aníbal Fernández y Julián Domínguez se disputarán la postulación a gobernador.
El otro foco de atención estará en el líder del PRO, Mauricio Macri, quien tendrá que ganarle la interna del frente Cambiemos a sus pares de la UCR, Ernesto Sanz, y de la Coalición Cívica, Elisa Carrió, para poder competir en octubre como candidato presidencial de esa alianza opositora.
Sin competencia. No obstante, Cambiemos no tendrá internas para la candidatura a gobernador bonaerense y, por ello, en ese distrito clave el objetivo de este frente es que la fórmula que integran la macrista María Eugenia Vidal y el radical Daniel Salvador salga fortalecida de la elección.
Una situación similar es la que enfrenta el líder del Frente Renovador, Sergio Massa, quien competirá en las Paso del domingo con el gobernador de Córdoba, José Manuel de la Sota, para definir la candidatura presidencial del frente UNA.
En este caso, tampoco habrá internas bonaerenses dado que UNA presenta como única fórmula para la Gobernación a Felipe Solá y Daniel Arroyo, quienes solo deberán superar el piso del 1,5 por ciento de los votos para llegar a octubre.
El otro espacio que definirá su fórmula presidencial es el Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), en el que se enfrentarán el binomio Jorge Altamira-Carlos Giordano, del Partido Obrero, contra Nicolás Del Caño-Myriam Bregman, referentes del PTS.
El frente Progresistas llevará como única fórmula presidencial a Margarita Stolbizer y Miguel Angel Olaviaga, y postula en la provincia de Buenos Aires a Jaime Linares, acompañado por Juan Carlos Pugliese (hijo).
También Compromiso Federal irá a las Paso con una única fórmula presidencial, integrada por Adolfo Rodríguez Saá y Liliana Negre de Alonso. El Frente Popular lleva a Víctor De Gennaro como precandidato presidencial, secundado por Evangelina Codoni. Finalmente, el MST-Nueva Izquierda propone como precandidato presidencial a Alejandro Bodart y el Nuevo MAS competirá con Manuela Castañeira; ambas fuerzas enfrentan el desafío de superar el 1,5 por ciento de los votos para llegar a octubre.
El mosaico federal. Buenos Aires no será la única provincia que tendrá Paso para definir las candidaturas a gobernador, también deberán pasar por ese filtro Entre Ríos, Chubut, Catamarca, San Juan y San Luis (ver página 5). Sin embargo, las primarias presidenciales serán el centro de atención dado que todos los partidos la tomarán como una especie de gran relevamiento electoral de cara a octubre, cuando no como una suerte de primera vuelta que ordenará el tablero.
En el PRO, la aplicación móvil que utilizarán los fiscales generales de cada zona (innovación con la que esperan sortear cualquier eventual problema de fiscalización) permitirá cargar la cantidad de votantes y los resultados de cada mesa.
El FpV, en cambio, abraza el sueño de que las primarias terminen funcionando como una primera vuelta que ordene todos los votos oficialistas y opositores (consagrando la polarización) y le permita una definición en octubre que no requiera del ballottage.
La realización de los comicios encontró algunas dificultades en las últimas horas debido a las intensas lluvias y debido a las inundaciones en algunas zonas bonaerenses, la Secretaría Electoral de la Provincia trasladó 18 centros de votación a otros establecimientos.
Parlasur, el debut de una categoría polémica
Los comicios tendrán como principal novedad la elección de diputados para el Parlamento del Mercosur (Parlasur). En las primarias y en los comicios generales los electores se encontrarán con dos boletas extra, ya que se elegirán 19 diputados del Mercosur por el distrito nacional y a 24 parlamentarios por las provincias y la ciudad de Buenos Aires, uno por cada distrito.
Cada fuerza o frente presentará en su boleta una lista de candidatos a parlamentarios del Mercosur a nivel nacional (la misma en todo el país); es decir por distrito único, y los 43 integrantes se definirán proporcionalmente a los resultados logrados, a través del sistema D'Hont. Los parlamentarios del Mercosur (cuya sede funciona en Montevideo) tendrán los mismos derechos que los diputados nacionales, en cuanto a inmunidades, regímenes remuneratorios, laborales, previsionales y protocolares. Quienes resulten electos no podrán desempeñar otro mandato o cargo legislativo o ejecutivo en sus países, y tendrán un mandato de 4 años, que comienza a regir el 10 de diciembre próximo.
Actualmente, el Parlasur está integrado por 188 miembros: 76 parlamentarios de Brasil, 43 de Argentina, 33 de Venezuela, 18 de Uruguay y otros 18 de Paraguay, que es el único país que elige a sus parlamentarios regionales de manera directa.
Según indicó la Dirección Nacional Electoral, con la implementación del voto directo de los representantes, Argentina "avanza en la consolidación de la democracia en la región". Sin embargo la cuestión generó muchas críticas de especialistas en Derecho Constitucional y un esbozo de rebelión por parte de la oposición.
Finalmente la oposición cedió en las críticas y prefirió acompañar sin conflicto. Les permitirá completar los casilleros de las candidaturas con dirigentes que, de otro modo, se hubieran quedado fuera de la elección.