El presidente Mauricio Macri admitió hoy ante la plana mayor del oficialismo que su Gobierno "cometió errores propios" pero sostuvo que "sin Cambiemos, la tormenta hubiera generado una crisis como la de 2001" en el país.
"Sin Cambiemos en el Gobierno, esta tormenta hubiese destruido hasta el último cimiento de la Argentina como pasó hace 17 años", dijo el Presidente al dar un discurso en la reunión de Gabinete ampliada que encabezó en la sede del CCK.
No obstante, agregó que "eso no pasó" porque actualmente hay un Gobierno "con una convicción clara y que tiene un vínculo muy fuerte con el mundo".
El Presidente se pronunció de esta forma al tomar la palabra en la reunión con cientos de funcionarios, en la que hizo una evaluación de la crisis cambiaria y reconoció errores propios, y además arengó a su tropa de cara a lo que resta de la gestión.
"Nunca en su historia la Argentina ha tenido este nivel de apoyo político de los principales países del mundo", resaltó Macri, quien anticipó que eso "se va a ratificar en noviembre, en la cumbre del G-20" que alojará el país.
Las palabras del mandatario trascendieron a la prensa pese a que las reuniones de Gabinetes son cerradas, sin acceso al periodismo: a la de Gabinete ampliado asistieron a escuchar al mandatario unos 800 funcionarios nacionales de todos los niveles, entre ministros, secretarios de Estado, subsecretarios y directores.
En el encuentro, además de Macri, hablaron la vicepresidenta Gabriela Michetti; el jefe del Gabinete, Marcos Peña; los ministros de Hacienda, Nicolás Dujovne, de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y de Producción, Dante Sica, y los jefes de los bloques de senadores de Cambiemos, Luis Naidenoff y el de diputados, Mario Negri.
"Cambiemos goza de buena salud", señaló Negri y agregó que la actual situación "no es la primera crisis que atraviesa la Argentina".
El Presidente remarcó también en su mensaje que "el mundo dijo que la Argentina es un faro en América latina que tenemos que fortalecer", y aludió a las elecciones del año próximo, al señalar que mantener ese rumbo "es algo que tiene que decidir esta sociedad" y que "es un momento de quiebre de los últimos 70 años".
"Estamos yendo hacia el futuro, hacia un futuro mejor para todos los argentinos, así que a levantarse, a trabajar y a transmitir eso", alentó.
Antes de Macri, Peña también fue uno de los oradores luego de ser ratificado en el Gabinete: el ministro coordinador reconoció errores del Gobierno pero pidió a los integrantes de Cambiemos tener "perspectiva" ante la crisis y "mirar en la película y no las fotos".
"Por ahí cometimos el error de transmitir la convicción de que las mayores dificultades habían pasado o que esta tarea era fácil. Y esto va para largo plazo, no hay necesariamente un punto de llegada", analizó Peña.
A su vez, pidió acostumbrarse "a la escasez que implica bajar a tierra y a la realidad, y administrar un Estado con austeridad", mientras que, pese a las dificultades que atraviesa el país, dijo que "el rumbo del cambio goza de un fuerte apoyo" y que "el 40 por ciento de argentinos hoy sigue diciendo que apoya a este Gobierno".