Por tercera vez en menos de una semana, el presidente Mauricio Macri y la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, se mostraron en público, en claros gestos de campaña electoral, aunque disimulados como actos de gestión. El escenario ahora fue Mar del Plata, donde ambos recorrieron el Hospital Bernardo Houssay, perteneciente al Pami, que volvió a funcionar con nuevo equipamiento luego de 3 años.
Tras cuestionar "la desidia y el abandono" que tuvo ese centro de salud, Macri volvió a resaltar el trabajo "en equipo" y aseguró que le espera "un gran futuro" a la Argentina.
"Contento de verificar una vez más que, si nos proponemos, lo hacemos, que si realmente trabajamos en equipo, diciéndonos la verdad, con honestidad, todos los problemas tienen solución. Podrán costarnos un poco más, podrán tardar un poco más, pero en este camino de trabajo en conjunto tenemos un gran futuro por delante", sostuvo el mandatario.
El presidente también valoró el trabajo del titular del Pami, Sergio Cassinotti, al afirmar que cuando asumió la Presidencia en 2015, esa institución tenía "muchos problemas financieros, de gestión, de corrupción".
"Hoy, con este Pami que se ido ordenando, que tiene equilibrio financiero, eso lo fortalece. Y si el Pami se fortalece, es tranquilidad para nuestros abuelos", añadió.
Por su parte, Vidal señaló que "este es el tercer hospital que ponemos en marcha en la provincia; empezamos con Esteban Echeverría, seguimos con Cañuelas y hoy este hospital, que significa, cuando esté totalmente operativo, mil puestos de trabajo y más de 100 camas para Mar del Plata y la región".
"Cuando esté habilitado al ciento por ciento contará con ocho quirófanos, una unidad de hemoterapia, un laboratorio clínico para internación, anatomía patológica, 25 consultorios externos y un hospital de día para tratamientos oncológicos y terapia transfusional", precisó.