La Iglesia salió a pedir moderación y flexibilidad
El presidente de la comisión de Educación de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, lo pidió ayer.
6 de marzo 2017 · 00:00hs
El presidente de la comisión de Educación de la Conferencia Episcopal y arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Martín, pidió ayer, ante la prevista movilización de protesta de la CGT, que gremialistas y la administración del presidente Mauricio Macri moderen el tono de su confrontación verbal. En la misma línea, recomendó al gobierno nacional y a los docentes flexibilicen posturas ante el conflicto que amenaza el inicio del ciclo lectivo.
Al hablar sobre el paro docente de 48 horas previsto para hoy y mañana, Martín consideró que las autoridades deben "dar lo que más se pueda" y los gremios "ceder un poco en sus reclamos".
"Preocupa la escalada de la confrontación, violencia verbal, porque aleja toda posibilidad de solución", advirtió el prelado, y señaló que el diálogo es "clave" para alcanzar "un acuerdo razonable que satisfaga a las partes".
Las afirmaciones de un alto miembro de la Iglesia Católica preceden a la que se aguarda como una semana conflictiva, debido a la huelga de docentes, la convocatoria a una protesta masiva por parte de las principales centrales obreras, la concurrencia, mañana, de la ex presidenta Cristina Kirchner a los Tribunales Federales para declarar en la causa Los Sauces, y una huelga de mujeres, el miércoles, como parte de un reclamo internacional por la igualdad de género.
Concentrado en Olivos
Por su parte, el presidente Mauricio Macri permanecerá mañana en la residencia de Olivos, donde llevará a cabo su agenda de actividades, que contempla un seguimiento a la marcha convocada por la CGT.
Ante una medida de fuerza que se espera masiva debido a la adhesión del PJ, el Partido Socialista y las dos facciones de la CTA, el centro porteño será blindado y la Casa Rosada permanecerá vallada.
Fuentes oficiales indicaron que "por razones de seguridad" las actividades del líder del PRO se realizarán en Olivos, donde se reunirá con los integrantes de la denominada "mesa chica" para encabezar una reunión de coordinación de gobierno y analizar la postura que deberá tomar el oficialismo tras la movilización.
Como justificativo se recordó que la casa Rosada se encuentra en refacciones.