El presidente de la Federación Argentina de la Magistratura, Víctor María Vélez, dijo que avala algunos puntos de la reforma judicial que se aprobó en el Parlamento, pero criticó la decisión de "partidizar la Justicia" por medio de la elección de consejeros de la Magistratura en boletas partidarias.
"Visto desde la realidad de las provincias, estoy de acuerdo y apoyo lo que tenga que ver con la transparencia y los concursos, sobre todo los de base, en relación a la idoneidad y la igualdad de oportunidades. Los sistemas de selección y remoción de magistrados deberían tener una composición equilibrada para tratar de que en las designaciones o remociones se juzgue la igualdad de oportunidades o el mal desempeño", manifestó el camarista cordobés a LaCapital.
—¿Y cuál es su opinión sobre la elección de consejeros?
—El Consejo de la Magistratura merece una reflexión sobre dos cuestiones. Los representantes de jueces, abogados y académicos van a ser elegidos por elección popular y, como usted dice, en nóminas de partidos políticos. No estoy de acuerdo con esto, no se puede partidizar la Justicia. Esto no quiere decir que los jueces no tengan ideas políticas, se trata de no partidizar a la Justicia. Y la segunda reflexión es que solo se necesita para designar o remover a los jueces mayoría simple, y lamentablemente siempre tendrá esa mayoría un determinado partido, es decir el que gobierne.
—¿Y qué pasa entonces con la lógica de la representación?
—La Constitución dice que el Consejo debe estar integrado por representantes de los jueces. Si no son los jueces, que serían los representados, los que designan a sus representantes se rompe la lógica entre representado y representante.
—¿Cree que la validez de la reforma judicial quedará en manos de la Corte?
—Me parece que sí. Hay planteos de diversas organizaciones. Creo que finalmente la Corte definirá la constitucionalidad.
—Con las denuncias de corrupción que han florecido en las últimas semanas la Justicia vuelve a estar en la mirada de todos.
—La investigación y juzgamiento de la corrupción administrativa es parte de la deuda que tenemos en la Argentina. En los rankings que hace Transparencia Internacional estamos muy abajo en estos temas. Me parece que la ciudadanía empieza a poner los ojos en la Justicia. También hay que decir que una cosa es la denuncia y otra lo que se pueda probar. Frente a la sospecha, la Justicia tiene que intervenir con todos los medios. Tiene que haber una verdadera vocación de todos los integrantes de los poderes en investigar la corrupción administrativa y juzgar a los responsables.
—Llama mucho la atención a los legos que en los casos de supuesta corrupción vinculados a Lázaro Báez, con las denuncias de bóvedas clandestinas, se hayan demorado tanto los allanamientos.
—No conozco los casos concretos. Las investigaciones en el inicio son secretas y quizás haya algunas cuestiones que los ciudadanos todavía no pueden conocer. Lo deseable es que no haya estas peleas de "tomala vos, dámela a mí" entre los jueces y que sí existan funcionarios judiciales dedicados a estas investigaciones.