La conducción de la Confederación General del Trabajo (CGT) confirmó ayer que los trabajadores privados y de empresas estatales recibirán el bono de 5.000 pesos para compensar la pérdida del poder adquisitivo del salario, una decisión que el presidente Mauricio Macri rubricará mediante un decreto de necesidad y urgencia, y decidió postergar el paro general que tenía previsto para este mes.
Así lo confirmó ayer el secretario general de la Sanidad, Héctor Daer, quien luego de la reunión que mantuvo el consejo directivo de la central obrera señaló que están "a la espera de la firma del decreto presidencial", que obligará a las empresas a realizar ese pago por única vez, en dos tramos, que se depositará con los salarios de noviembre y de enero.
Aunque el bono no alcanza a los trabajadores del sector público, Daer confirmó que el gremio de UPCN, comandado por Andrés Rodríguez, negocia con el gobierno para obtener ese beneficio para los trabajadores de ese sector.
Las idas y vueltas en torno a la implementación de este beneficio y su alcance puso en alerta a la CGT, que hasta ayer no descartaba continuar con la medida de fuerza que había lanzado por 36 horas contra la política oficial. Las principales dudas radicaban en que el decreto presidencial incluya una cláusula que había reclamado la Unión Industrial Argentina (UIA) en la cual se planteaba que el bono fuera considerado a cuenta de futuros aumentos, lo que es rechazado por los sindicalistas.
La decisión de suspender la medida de fuerza también vino acompañado de un compromiso por parte del gobierno nacional de incluir en el decreto presidencial una cláusula "antidespidos", la cual establecería que las empresas que pretendan recortar plantillas de personal deberán informar al Ministerio de Producción, que conduce Dante Sica, diez días antes de concretar el despido sin causa.
Una vez recibida esa notificación, el ministerio podrá actuar como una suerte de mediador, convocando a las partes para analizar la situación y buscar herramientas que permitan evitar las cesantías.
Entre las posibilidades que se analizaban se encontraban la posibilidad de una reducción de horas o suspensiones acordadas, como actualmente están realizando algunos sectores para paliar la caída de la actividad.
Ayer el ministro Sica, quien fue el negociador que acercó al gobierno con empresarios y gremios, exhortó "a todos a hacer un esfuerzo" para llegar a un acuerdo sobre el bono de fin de año.
Sostuvo que en la negociación con los empresarios y sindicalistas "todos tenemos que hacer un esfuerzo para poder llegar a un acuerdo que satisfaga a la mayoría, preservando la capacidad adquisitiva del salario de los trabajadores y el deseo de todos, que es el mantenimiento del nivel de empleo".╠
Tras una reunión de gabinete con el presidente Macri, el funcionario dijo que desde el gobierno "lo que estamos planteando es un bono de 5.000 pesos pagadero en dos veces, y después, en función del tamaño de la empresa, algunos sectores con flexibilidad podrán pactar algunas cosas distintas".╠
Además, señaló que en la negociación "el gobierno también cede y pone su parte; lo que estamos planteando nosotros es que el bono no sea remunerativo hasta 5.000 pesos, y a partir de ahí hay algún sector que pueda absorber este esfuerzo. En muchas negociaciones que se están realizando hay sectores que están acordando bonos que son superiores a este valor".╠
Jubilados, afuera
Por otra parte, Sica aclaró que las tratativas sólo comprenden al sector privado y que la negociación con los estatales "está encaminada", mientras que los jubilados y pensionados "no forman parte de la discusión porque tienen su propio sistema de actualización" de haberes.╠╠
Ayer el dirigente de la Unión Industrial Argentina (UIA) José Urtubey alertó que "hay muchas empresas que no van a poder pagar el bono, por lo cual el gobierno va a tener que dar beneficios impositivos y financieros, particularmente a las pymes, ya que hay muchas que están peleando su subsistencia".╠
"Hablo en el contexto de una fuerte crisis económica, donde hay una alta presión tributaria, un mercado interno deprimido y no hay crédito", dijo, y recordó que el "Indec esta semana anunció una baja del 11,5 por ciento de la actividad industrial en septiembre, y esto te lleva a una economía en la que trabajadores, productores y empresas están mal porque es un modelo que no contiene a todos".╠
Sin embargo, reconoció que "algunas empresas, en especial las grandes, van a poder pagarlo".
Negativa de Lifschitz
Ayer el gobernador Miguel Lifschitz reiteró la negativa del gobierno de Santa Fe a pagar ese extra. "El bono fue un anuncio bastante irresponsable del gobierno nacional. No está claro a quién le corresponde. Los empresarios ya plantearon sus imposibilidades de abonarlo. En principio no se aplica al sector público. Y mucho menos en Santa Fe, donde tenemos cláusula gatillo", dijo.
El mandatario santafesino confirmó además que "nadie tiene confianza en cómo se va a desarrollar la economía del país", pero pese a eso, y de acuerdo a los términos formales, el Ejecutivo enviará a la Legislatura "en los próximos días" el proyecto de presupuesto 2019. "Se priorizará la obra pública, la educación, salud y seguridad. Después ordenará las partidas para terminar con un presupuesto sin déficit a fin de año", indicó el gobernador.