Con el juez Ernesto Luis Marinelli a cargo en primera instancia de las causas
por el uso de las reservas monetarias para el pago de la deuda pública, la Cámara en lo Contencioso
Administrativo Federal resolverá esta semana si Martín Redrado puede seguir al frente del Banco
Central.
Así, la expectativa estará nuevamente centrada en la Justicia, que deberá
decidir si da vía libre al decreto 18/09 y lo desplaza de su cargo. En tanto, las reservas del BCRA
seguirán todavía lejos del alcance del gobierno, por lo menos hasta la semana del 25 de enero.
Hasta hoy las partes del expediente tienen tiempo de presentarle al juez
Marinelli sus opiniones ante la apelación hecha por el gobierno por el fallo que respaldó a Redrado
en su cargo.
Mañana Marinelli —que reemplaza a la jueza María José Sarmiento en el
caso— remitirá el expediente a la Cámara que, ahora, también estará integrada por nuevos
magistrados: la jueza Clara Do Pico y Marta Herrera serán las encargadas de tramitar los
expedientes por el Banco Central.
Ellas analizarán si Redrado incumplió sus deberes de funcionario público al no
abrir la cuenta en el tesoro para depositar los 6.569 millones de dólares salidos de las reservas
del Central, tal como lo disponía el Fondo del Bicentenario instrumentado en el decreto
2010/09.
Ayer, por lo pronto, Marinelli se hizo cargo de las causas que instruía su par
Sarmiento, al reemplazarla oficialmente en la segunda quincena de la feria judicial de enero.
En consecuencia Marinelli deberá entender en las causas que la Cámara de
Apelaciones le devolvió a Sarmiento el jueves.
La jueza Sarmiento fue duramente criticada desde el gobierno por hacer lugar a
los amparos planteados por la oposición; incluso desde la administración le enviaron un patrullero
a su casa un sábado a la mañana para que recibiera la apelación oficial, en una circunstancia que
la propia jueza leyó como un acto intimidatorio.
La semana pasada, incluso, el procurador del Tesoro, Osvaldo Guglielmino, radicó
una denuncia contra el jefe de diputados del PRO Federico Pinedo por “estafa procesal”
e involucró a la jueza Sarmiento en ese presunto delito al considerarla una participe
necesaria.
El juez Marinelli, de 52 años, trabaja en la Justicia desde hace 30 años y es
magistrado desde octubre 1993, cuando fue designado titular del Juzgado de Primera Instancia en lo
Contencioso Administrativo Federal 1.
Los decretos 2010/09 y 18/10 dieron paso a un fuerte debate político que
motorizó la oposición frente al evidente intento de la presidenta Cristina Kirchner de eludir la
intervención del Congreso: ella dictó esos decretos de necesidad y urgencia luego de vencido el
plazo de sesiones ordinarias y no convocó a extroardinarias, por lo cual la oposición afirma que
fue burlado el debate legislativo.
Hace unos días Redrado había hecho público su intención de permanecer en el
cargo: “He tomado la decisión de seguir hasta el final, salvo que un plenario del Congreso me
diga que me tengo que ir”, dijo.
Ahora será la Justicia quien defina si “el okupa del Banco Central”,
como lo definió la presidenta Cristina Fernández, cumple su mandato que termina en agosto.
La situación de Redrado se fue debilitando con el paso de los días a medida que
parte de la oposición, en especial el radicalismo, le fue quitando respaldo. Ayer hasta el diputado
Ricardo Alfonsín declaró que de estar en su lugar “renunciaría”. Elisa Carrió lo
defendió siempre.