El presidente Mauricio Macri se mostró ayer con la gobernadora bonaerense María Eugenia Vidal en una reunión con varios integrantes de sus respectivos gabinetes en Trenque Lauquen, donde ambos mandatarios hicieron gestos de distensión tras los cortocircuitos entre ambas administraciones por el devaluado Fondo del Conurbano.
En ese marco, tanto en la Casa Rosada como en la Gobernación aseguran que habrá una compensación para la provincia, algo que hasta hace poco descartaban para 2018.
Macri estuvo acompañado por varios de sus ministros y secretarios de Estado, mientras que Vidal fue acompañada por todo su gabinete.
Antes del encuentro grupal, Macri y Vidal compartieron una reunión a solas junto al intendente local, Miguel Fernández, tras lo cual se mostraron juntos y sonrientes. El encuentro se pactó la semana pasada en el clímax del malhumor bonarense, con los cruces incluidos entre el ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín de la Torre, con los ministros Dujovne y Frigerio.
La provincia reclamaba $19 mil millones para 2019 para actualizar el fondo de $65 mil millones, pero ahora podrían llegar entre $10 y $15 mil millones antes de fin de año.
En diálogo con la prensa, Macri sostuvo luego que su gobierno está "resolviendo de a poco los problemas que se fueron acumulando durante 70 años", y subrayó que "los primeros cinco meses de este año fue lo peor que me paso en la vida".
También prometió "atacar la corrupción en serio", y destacó que "es la primera vez que la Argentina entró en crisis con un equipo y reglas y salió con el mismo equipo y las mismas reglas".
Macri sostuvo que trabaja "todos los días para que cada argentino esté mejor", y añadió que "sin crédito y con sequía, la única posibilidad es que el Fondo Monetario Internacional nos acompañe para recorrer este camino, y con un apoyo muy grande del mundo como nunca antes".
Dijo que el FMI "nos dio el dinero en condiciones más baratas que el que se da en el mercado" para que "vaya para la gente y no para el Estado, que gasta más de lo que tiene".
Admitió que los impuestos "son muy altos" y que "hay que bajarlos para poder crecer", y "no creer más en propuestas mágicas".
Remarcó también que el equipo de gobierno "trabaja en coordinación con los gobernadores e intendentes para brindar solución concreta a la gente", porque "tenemos claro cuál es el rumbo".