El juez Andrés D’Alessio, integrante del tribunal que condenó a las Juntas Militares en 1985, murió a los 68 años en su vivienda de la Capital Federal víctima de una larga enfermedad, según informaron voceros de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El juez Andrés D’Alessio, integrante del tribunal que condenó a las Juntas Militares en 1985, murió a los 68 años en su vivienda de la Capital Federal víctima de una larga enfermedad, según informaron voceros de la Universidad de Buenos Aires (UBA).
El magistrado falleció anteanoche y era velado desde las 10 de ayer en el la sala del Consejo Directivo de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UBA, en la avenida Figueroa Alcorta 2263, de la que fue dos veces decano, y a la que había ingresado como estudiante en 1958.
El sepelio será hoy a las 10 en el cementerio de Olivos.
El rector Rubén Hallú y las autoridades de la UBA expresaron "su profundo dolor y pesar" por el fallecimiento del juez y consideraron que "es una gran pérdida que para todos los que integran la comunidad académica".
D’Alessio había nacido el 17 de abril de 1940 e integró el tribunal que en 1985 condenó a los militares de la última dictadura, durante el gobierno de Raúl Alfonsín, del cual, posteriormente, fue procurador General de la Nación.
El fallecido magistrado, entre 1984 y 1987, se desempeñó como juez de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional de la Capital Federal, y en ese carácter participó del histórico juicio a las Juntas.
Como abogado defensor, se desempeñó en algunos casos de pública resonancia, como las defensas de los jueces Ricardo Lona, en 2004 y de Juan José Galeano, éste por sus presuntas responsabilidades en el caso del ataque terrorista a la Amia, causa de la que estuvo a cargo.
El juicio a las Juntas fue el proceso judicial realizado por la Justicia civil en 1985, por orden de Alfonsín, contra las tres primeras Juntas Militares del denominado Proceso de Reorganización Nacional (1976-1983), por las graves y masivas violaciones de derechos humanos cometidas en ese período.
La sentencia condenó a los integrantes de las tres primeras Juntas a severas penas, pero fueron indultados en 1990 por el presidente Carlos Menem. A partir de 2006 la Justicia comenzó a declarar inconstitucional los indultos decretados.
El fallecimiento se produce, curiosamente, cuatro días después del de Alfonsín, quien también fue recordado, en las masivas exequias que se le realizaron, por su labor en defensa de los derechos humanos.
D’Alessio, durante su carrera, ejerció cargos docentes en la Facultad de Derecho de la UBA varios períodos desde 1965, a la vez que ejerció privadamente, primero como procurador y luego como abogado.
Entre 1974 y 1977 se incorporó a la Procuración General de la Nación donde fue secretario letrado.
En 1974 fue designado profesor adjunto interino de derecho penal. Entre 1977 y 1979, fue abogado de la Administración Nacional de Aduanas.
Entre 1980 y 1982, ocupó el cargo de secretario de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y en 1984 fue designado titular interino de derecho penal.
En 1987, fue designado procurador General de la Nación y en 1994 fue elegido decano de la Facultad de Derecho de la UBA, cargo que ejerció hasta 2002.