La CGT comenzó a preparar el terreno para las negociaciones paritarias que comenzarán en marzo, mientras integrantes de la cúpula coincidieron en enfocar el nivel de la inflación como el centro de la discusión.
La CGT comenzó a preparar el terreno para las negociaciones paritarias que comenzarán en marzo, mientras integrantes de la cúpula coincidieron en enfocar el nivel de la inflación como el centro de la discusión.
"A los dirigentes gremiales lo que más nos asusta es la inflación. Entre precios y salarios, los precios siempre van a ganar, esa es la historia", sostuvo Antonio Caló, titular de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM).
El sindicalista aseguró que "hay un deterioro" del poder adquisitivo del salario, aunque admitió que no tenía "idea de a cuánto asciende la inflación".
"Yo discuto salarios, no inflación. Si el Indec dice que la inflación (anual) es de 10 por ciento pero la UOM entiende que el poder adquisitivo del salario se deterioró más, vamos a pedir más", advirtió.
El reclamo de actualización salarial de Caló prosiguió a una escalada de reclamos de subas de los haberes en varios gremios, que se vieron recompensados por decisiones empresarias hacia el final del año.
Las terminales automotrices gratificaron a los mecánicos por su cooperación durante el año, lo que fue seguido de reclamos de autopartistas y del gremio de neumáticos, a los que se agregaron los encargados de edificios (Suteryh) que obtuvieron 300 pesos y los docentes universitarios.
El titular de la CGT, Hugo Moyano, participó de la cena de despedida del año del sindicato de los empleados judiciales, donde se anunció que dicho gremio reclamará este año aumentos del 20 por ciento.
Caló dijo que los metalúrgicos comenzarán a discutir paritarias en marzo y elogió la discusión sin interferencias: "Lo mejor es que nos dejen discutir libremente; cada uno en su gremio sabe hasta dónde puede llegar". Por último opinó que la CGT deberá concentrarse en "discutir el salario mínimo, vital y móvil".